OAXACA, OAX., abril 22.- Bajo el laurel del Jardín de la Constitución, la presentación de 100 músicos en concierto realizada por la Banda de Betaza, engalanó el corazón del Centro Histórico, al interpretar las piezas musicales del flamante compositor oaxaqueño, Narciso Lico Carrillo.
Lo anterior, como parte de las actividades programadas por el municipio capitalino para celebrar el 480 Aniversario del otorgamiento del título de Ciudad a Oaxaca.
El magno concierto que ofrecieron las y los músicos, originarios de San Melchor Betaza, Oaxaca, inició al medio día, rompiendo el silencio de un público atento y ávido por escuchar las interpretaciones musicales de la majestuosa banda.
Durante más de 120 minutos, las y los destacados músicos, cuyas edades oscilan entre los 10 y 29 años, interpretaron 12 piezas musicales del maestro, músico y compositor Narciso Lico Carrillo, en un espectacular escenario histórico decorado por la Catedral, construida entre 1535 y 1733, así como por los laureles sembrados desde 1844.
La primera pieza musical que emanó de los sonidos rítmicos del bombo, los platillos, las flautas y los platillos, entre otros instrumentos musicales, fue el son “Cuando baila Don Vicente”, el cual estuvo dirigido por el maestro Raúl Lico Ventura, hijo del compositor oaxaqueño.
Posteriormente, los maestros Benito Flores Vicente, Mario Santiago Vásquez, y Julio Alejandro Huantes Teodosio dirigieron respectivamente la cumbia “Para alguien como tú”, la obertura “Sangre Mixe” y el son “Amor istmeño”, canciones que motivaron al público a bailar.
El danzón “Quiero un café”, con su compás musical que lo caracteriza, llenó de folclor y elegancia el Zócalo capitalino. Otras interpretaciones del repertorio de Narciso Lico Carrillo que también se tocaron fueron el bolero “La inolvidable” y el son “Niña Hermosa”.
Las dos últimas piezas musicales que las manos jóvenes de las y los músicos tocaron fue el danzón “Santaella” y el son “Yea Huis”, melodías dirigidas por los maestros Benito Flores Vicente y Mario Santiago Vásquez, respectivamente.
El momento culminante del concierto fue cuando el maestro Narciso Lico Carrillo tomó la batuta para interpretar “Raíces Betanzeñas”, melodía que recopila los sones y jarabes de la región.
La Banda de Betaza se despidió con la interpretación de los sones y jarabes del valle, melodía que fue ovacionada y puso al público de pie.
