Periodismo libre y comprometido

Search
Search
O A X A C A Clima de Hoy

De los nini´s a los sisi´s

Con enorme satisfacción observo que el actuar y accionar de los jóvenes mexicanos ha cambiado en los últimos años de manera impresionantemente rápida. Por lo que su poder e influencia vienen siendo motor determinante para ir rompiendo con viejos esquemas que no solamente terminaban con hacerles daño a los propios jóvenes, sino de manera muy marcada afectaban a nuestro país. Sin duda que asistimos a una “juvenilización” de la sociedad, o lo que es lo mismo, a una nueva forma de ir construyendo el futuro de nuestro estado y de nuestra nación.

Desde luego que son diversos los factores que se manifiestan para lograr que los jóvenes adquieran una importancia sobresaliente: son los principales consumidores, se enfrentan a un mercado laboral complicado, manejan tecnologías distintas a las de antaño, pero principalmente denotan un compromiso social y político con las mejores causas, quizá derivado de su misma preparación.

Los jóvenes se encuentran cada vez más capacitados para adaptarse al mundo en que viven. Hoy se lee más, se estudia más que en los tiempos de nuestros padres. Resulta evidente el número de jóvenes que frecuenta las escuelas, colegios, institutos, escuelas técnicas, centros de artes y oficios, universidades, etc. Se crea un gran sentido comunitario y una sensibilidad nueva para sentir la injusticia social.

En pocas palabras parecen haberse dado cuenta que para aspirar a tener mejores condiciones de vida, deben esforzarse para competir con otros jóvenes que teniendo todas las facilidades económicas de su lado, han venido aprovechando los espacios que por el proceder equivocado de unos cuantos ha generado una abismal diferencia entre los mismos jóvenes.

De ahí que ahora comiencen a agruparse para exigir lo contrario a lo que antes se demandaba, pues todo indica que han descubierto que los únicos afectados con esas prácticas dañinas, eran ellos mismos. Por eso es que hoy sostengo que estamos pasando de los jóvenes nini´s, o sea los que ni estudian, ni trabajan; a la época de los jóvenes sisi´s, o sea lo que si estudian y si exigen el cumplimiento a sus derechos.

Basta con ver los últimos acontecimientos registrados en diversos centros de enseñanza media superior y superior en estados como el de Michoacán, el Distrito Federal, el Estado de México y recientemente en Oaxaca –aunque con características y razones distintas en este último—para comprobar que ahora los jóvenes se agrupan para recuperar sus escuelas que han sido tomadas por decenas de pseudoestudiantes que lo único que propician en una preparación deficiente en quienes han descubierto que como consecuencia de ello, las grandes empresas colocan en sus oficinas de recursos humanos “no se contrata a egresados de Universidades públicas”.

Por supuesto que el surgimiento del #YoSoy132 antes de que este desviara su propósito, vino a despertar esa conciencia entre nuestros jóvenes quienes ahora no esperan que las cosas sucedan, sino que actúan para que estas sucedan. He ahí la gran diferencia.

Hay que destacar asimismo, el importante papel que va teniendo la mujer en la vida social y cultural. De ser solamente novia, esposa, ha pasado a ser compañera, amiga y miembro del mismo equipo de trabajo o estudio. En las escuelas, fábricas, oficinas, comercios, universidades, la mujer está muchas veces luchando por equipararse al hombre, teniendo el mismo papel, similares necesidades y las mismas metas que el hombre.

Hay una mayor relación entre chicos y chicas, y esto hace que esas relaciones se produzcan en un clima de mayor naturalidad y exento de los prejuicios y tabúes de otras épocas. Puedo aseverar que la energía y la fuerza física de los varones, ha sido canalizada gracias a la sugerencia e inteligencia de las mujeres (conste que no digo que los hombres no seamos inteligentes eh) en actividades que lejos de perjudicarlos, ahora les augura un mejor futuro.

Aunque incipiente este cambio de nini´s a sisi´s, sin dula alentador que comiencen a darse los primeros pasos para ello y terminar con aquella choteada frase de que los jóvenes son el futuro de México, pues nos están demostrando que son el presente y que lo quieren distinto al país que les hemos heredado.

Hoy los jóvenes acusan a los mayores de un excesivo amor por el dinero y el bienestar, de una explotación desmedida hacia su prójimo, de deshonestidad en los negocios, de corrupción en la política y de un acusado conservadurismo e hipocresía. Atacan el “buen aparentar” ante la sociedad. Asimismo rechazan la sociedad establecida y dentro de ella, sus lacras y –en muchas ocasiones– también sus logros. Por eso solían marginarse, entendiendo de modo diametralmente opuesto a los adultos las grandes cuestiones de la vida: amor, trabajo, religión.

En esta oposición son tan dogmáticos como los adultos en su seguridad instalada. Pero hoy la realidad real le ha hecho ver que cambian su entorno o como ha sucedido con otras generaciones, el entorno los cambia a ellos.

Ejemplo de lo aquí escrito se registró 6 días atrás en Coahuila, cuando Miguel Ángel Miramontes, de apenas 14 años de edad y alumno de tercer año de la escuela Técnica 83, empezó a gritarle al gobernador Rubén Moreira cuando éste se bajó de su camioneta y se disponía a entrar a la escuela lo siguiente: “Devuélveme mi dinero”; ¿Cuál dinero?, respondió el gobernador. “El de la deuda, el que se robaron”, le contestó el estudiante. “Vamos a platicar”, le dijo Rubén Moreira y le extendió el saludo, pero el muchacho se negó a platicar.

La mirada firme del joven adolescentes no pudo ser sostenida por el gobernador quien esquivando la vista sólo le dio la espalda y aceleró el paso. El resto lo terminaron de hacer sus guardaespaldas no sin el reclamo y apoyo de los compañeros de Miguel Ángel quien había tenido la osadía de decirle al gobernador lo que muchos adultos no se atreven.

De ahí mi cifrada esperanza de que estemos asistiendo al arribo de una nueva generación que habrá de impulsar los verdaderos cambios que como sociedad necesitamos y no sólo aquéllos que benefician a un reducido grupo o a señalados intereses particulares. Serán los jóvenes y su entusiasmo encausado los que nos guiarán por el camino que por desidia e indiferencia los adultos extraviamos.

¡Bienvenidos los sisi´s!

Twiter: @Mario_Mendoza_F

 

Scroll al inicio