OAXACA, OAX., marzo 24.- Dirigentes estatales del PRI, PRD y PAN criticaron la decisión de la poderosa Sección 22 de la CNTE y exigieron a sus integrantes “no violentar el proceso electoral de junio próximo, así como el derecho constitucional de las y los oaxaqueños a elegir a sus autoridades”.

Les dijeron que “así como tienen derecho a manifestarse también deben respetar el derecho de las y los oaxaqueños de acudir a las urnas”, ya que “es una regresión no permitir que se instalen las casillas en las escuelas”, como lo acordaron el fin de semana en su asamblea estatal.

Elizabeth Acosta López, secretaria general del Partido Revolucionario Institucional (PRI), lamentó que el Magisterio vulnere los derechos políticos de los partidos políticos y de los ciudadanos para elegir con libertad a sus gobernantes.

“Por su problemas internos cada día van vulnerando más los derechos ciudadanos, porque actúan de esta manera, pero sabemos que a los pocos días los resuelven con el Gobierno del Estado y los únicos que plagan los platos rotos son los ciudadanos”, acusó.

Acosta López afirmó que la Sección 22 del SNTE está afectando la vida política y social de Oaxaca, “porque no están peleando por derechos laborales, de ser así sería equitativo y no para unos cuantos”.

La dirigente partidista reprobó que el Gobierno del Estado se presta a los chantajes y presiones de la Sección 22 porque laceran los derechos en Oaxaca y en todo el país.

A su juicio, la educación tiene que estar por encima de los intereses personales y brindar educación competitiva a los y las niños de Oaxaca para que accedan a una mejor calidad de vida.

“Hoy solo están viendo por sus intereses y de sus grupos. Eso es lamentable”, acusó.

Pidió al magisterio reflexionar porque lo único que provocan es desestabilidad social y no un desarrollo económico.

Por su parte, el dirigente estatal del PAN, Juan Mendoza Reyes, dijo que los derechos no se consiguen a partir de la presión, actuando fuera de la ley y violentando los derechos de terceros.

Urgió al Magisterio a encausar sus demandas por vía de las instituciones federales y estatales.

Mendoza Reyes demandó también a los integrantes del Congreso del Estado “legislar sobre la nueva ley educativa de Oaxaca; que los diputados y diputadas se pongan a trabajar porque lo cierto es que ha existido una omisión del Congreso”.

El dirigente del PAN en Oaxaca advirtió que si el Congreso del Estado no legisla en la materia, “se puede poner en riesgo la elección del 7 de junio próximo”.

Sin embargo, aclaró que no comparte la presión a los órganos electorales y el amagar con impedir las elecciones para obtener respuesta a sus demandas. “Que los amagues y presiones cesen y se permita a la ciudadanía acudir a emitir su voto el 7 de junio”, exigió.

Insistió en que ninguna autoridad, sindicato o partido político puede coartar el derecho de la ciudadanía a votar y ser votada.

En tanto, el presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carol Antonio Altamirano, confió en que la decisión de la Sección 22 de la CNTE no sea tan radical y afecte los derechos constitucionales de las y los oaxaqueños de elegir a sus representantes populares.

Tras recordar que la sociedad y los partidos políticos han sido respetuosos de los derechos de manifestación de los maestros, éstos deben entender que no pueden impedir que los ciudadanos acudan a las urnas el 7 de junio.

Antonio Altamirano calificó como una regresión que la Sección 22 de la CNTE no permita que se instalen las casillas en escuelas públicas al ser espacios públicos imparcial.

“Antes se instalaban las casillas en domicilios de conocidos priistas para controlar el voto. El pretender tomar esa decisión es desafortunado porque representa una regresión a la democracia”, subrayó.

El dirigente del PRD en Oaxaca llamó a la sensatez de los integrantes de la Sección 22 y a respetar el derecho constitucional de los ciudadanos de ir a votar por sus autoridades.

Reconoció que los integrantes del Magisterio tienen todo el derecho a manifestarse, “pero no pueden afectar una obligación constitucional y violentar el proceso electoral para que los ciudadanos elijan a sus autoridades”.

Aun cuando se dijo partidario de las demandas de los trabajadores de la educación, Antonio Altamirano consideró que los métodos de lucha que han emprendido en lugar de ayudar y generar simpatía de la gente humilde, ya tienen a los ciudadanos en contra.

“El maestro sensato tiene que protestar con firmeza y no afectar derechos ciudadanos que han costado sangre al país”, subrayó.