OAXACA, OAX., enero 31.- Gonzalo Alonso Calzada Guerrero, obispo coadjutor de la Arquidiócesis de Antequera, rechazó que la Iglesia y el arzobispo de Oaxaca, José Luis Chávez Botello, encubran los casos de pederastia a manos del sacerdote Gerardo Silvestre Hernández, quien se encuentra encarcelado en Tlaxiaco acusado de la presunta violación de 45 niños indígenas y que hasta la fecha no se le ha decretado sentencia.
Ante las declaraciones del Foro Oaxaqueño de la Niñez (FONI) y el sacerdote Apolonio Merino, en las que acusan al Jefe de la Iglesia Católica en Oaxaca de proteger a Silvestre Hernández, quien presuntamente habría violado a más de 100 niños indígenas en las distintas comunidades donde brindó su servicio pastoral, Calzada Guerrero puntualizó que las organizaciones denunciantes no han presentado ninguna prueba del caso.
“No es a través de los medios de comunicación como se deben hacer las denuncias, para eso están las instancias correspondientes, como los ministerios públicos y jueces, a quienes se les tienen que presentar pruebas”, expresó, pues aunque no desestima las acusaciones del Foro Oaxaqueño de la Niñez y del cura Apolonio Merino, “no es a través de los medios de comunicación como se va a juzgar”, recalcó.
En conferencia de prensa, luego de la misa dominical de mediodía, el Obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Antequera también aclaró que los sacerdotes cesados no fueron sancionados por denunciar los presuntos actos de pederastia de Gerardo Silvestre, sino por otras situaciones que la Iglesia daría a conocer cuando así lo considerara oportuno, dando por terminado el tema de los casos de pederastia en la Arquidiócesis de Oaxaca.
