Palabras de Francisco Álvarez Figueroa, presidente del Consejo Ciudadano para la Vigilancia de la Transición Gubernamental, durante la toma de protesta de sus integrantes por parte del gobernador electo de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, la mañana de este lunes:

Lic. Gabino Cué Monteagudo Gobernador Electo del Estado de Oaxaca

Distinguidos Consejeros Técnico y Asesor

Consejeros Ciudadanos

Dip Benjamín Robles Montoya Srio. Técnico de la Transición y Planeación

Señoras y Señores:

Estamos ante la obligación cívica, ética y moral de cimentar, gobierno y sociedad una democracia participativa donde todos aportemos, para lo cual, hemos de trabajar por generar los mecanismos y espacios institucionales y ciudadanos que nos permitan colaborar ordenadamente en el reclamo al gobierno de las demandas de la comunidad, pero también debemos trabajar tenazmente en la edificación de un gobierno eficaz a la hora de atenderlas.

La sociedad ha de ser co-responsable con un gobierno que impulse la transparencia y la rendición de cuentas como mecanismos para acabar con la corrupción, la impunidad y la injusticia, marco en el cual surge éste Consejo Ciudadano, con algunas características como son: su temporalidad –termina el 30 de noviembre– es local, colegiado y se rige por el derecho privado.

Algunas de las acciones que hemos de emprender en la vida de éste Consejo serán sin duda las de: Vigilancia, testigo y observador del proceso de la transición gubernamental, vocero e informador a la comunidad sobre la evolución o retroceso en este tema y en el acto de la entrega-recepción, acompañará a las instituciones del estado que nos lo permitan en esté cambio de gobierno, convocará a la ciudadanía, promoverá la ética política en el ejercicio público, dialogará con quien deba hacerlo, emprenderá las gestiones necesarias y se vinculará con las personas e instituciones cuyos fines sean similares a los nuestros.

Para alcanzar estos propósitos invitamos a Transparencia Mexicana, organismo promotor de políticas públicas y actitudes privadas en contra de la corrupción, a que nos acompañen en este proceso de transición, ellos aceptaron así que, otros ojos verán, otros oídos oirán y otros pasos se darán. En las próximas semanas contactaremos con otros organismos nacionales relacionados con estos temas.

El objetivo final es que la ciudadanía pueda contar con las políticas públicas necesarias para enfrentar los nuevos retos sociales e institucionales y una forma para lograrlo consiste en que el nuevo gobierno cuente con un proceso de planeación ordenado y previsto en el presupuesto del año 2011 y para ello es necesaria una transparente y oportuna –sin prisas– entrega recepción del régimen que fenece al gobierno que nace.

Y este es el punto en el que hemos de detenernos, de vigilar y atender.

pues el acto de entrega recepción, debe hacerse con tiempo suficiente ya que es un acto administrativo indispensable y muy importante pues proporcionaría al nuevo régimen la información sobre el estado que guarda la administración pública estatal, aspecto necesario para dar continuidad a los planes y programas tan urgentes en un estado pobre como Oaxaca.

Ninguna relación hay entre este asunto eminentemente técnico y el adelanto de los tiempos de gobierno, no hay dudas, el régimen saliente tendrá que responder por sus actos ante la sociedad y la historia, por lo que haga o deje de hacer hasta el 30 de noviembre por que esos son los tiempos legales, sin embargo los términos morales le imponen la necesidad de actuar sin dilación, sin opacidad, con altura de miras y anteponiendo el bien de Oaxaca a cualquier interés personal o de grupo.

Quienes conformamos este Consejo lo hacemos de manera libre, voluntaria, como ciudadanos, sin retribución alguna, sólo respondiendo a nuestro amor por Oaxaca y al compromiso ético que tenemos con la democracia; por eso aceptamos gustosos la invitación que nos hizo el gobernador electo, Gabino Cué, para acompañarlo en esta etapa y nos comprometemos con su intención de conducirnos en la consolidación de un gobierno honesto, abierto y justo.

La ciudadanía oaxaqueña está llamada a dejar de lado las barreras que le impiden impulsar mediante su participación, la búsqueda legítima del bien común.

Francisco Álvarez