El gobernador electo de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, sostuvo que buscará una nueva relación con el magisterio oaxaqueño para trabajar en conjunto y atender el rezago educativo que aqueja la entidad; sin embargo, manifestó su respeto a sus formas y métodos de lucha.

En conferencia de medios y a pregunta expresa de cuál será su relación con este sector, sostuvo que las organizaciones, entre ellas el magisterio, deben analizar cuál va a ser su rol en esta etapa de transición democrática, para consolidar los cambios que demanda la entidad.

“Yo creo que las maestras y los maestros están convencidos de que hay que relanzar una nueva relación, yo creo que ellos nunca van a claudicar a sus formas y métodos de lucha, yo nunca se los pediría, en un régimen democrático no puede haber condicionamiento de ningún tipo”, subrayó el futuro mandatario estatal.

En conferencia de medios, abundó que el magisterio conoce el momento histórico que vive la entidad, y está consciente de su vocación por una educación de calidad.

Por ello dijo que en los primeros días de su administración buscará reunirse con sus representantes para juntos trabajar en la redefinición y alineación de políticas públicas, con el fin de atender el rezago y la tasa de deserción escolar, así como diferentes temas que tienen que ver con la educación.

Cué mencionó que el 4 de julio fue un hecho histórico que quedará en la historia de Oaxaca, pues después de 81 años la sociedad logró la alternancia.

“Es un hecho que no podemos minimizar y nos obliga a todos a replantearnos cuál va a ser nuestro rol en este momento histórico, hay temas que le corresponde al gobierno y otras a la sociedad y a las organizaciones sociales”, manifestó.

Para el triunfador del 4 de julio si no hay una educación de calidad, “Oaxaca no logrará ser un gran estado, que ha dado mucho a la nación, y hombres como Benito Juárez o José Vasconcelos, y revolucionarios como los hermanos Flores Magón”.

El mando único en la policía debe ajustarse a las condiciones de Oaxaca

Al señalar que el tema del mando único en la policía aun se encuentra a debate al seno del Senado de la República, el gobernador electo, Gabino Cué, planteó que el asunto debe abordarse desde las particularidades propias de cada entidad, como es el caso de Oaxaca.

En su acostumbrada conferencia de prensa explicó que en la entidad existen municipios que ni siquiera cuentan con una fuerza de policía municipal, porque servir en esta área forma parte de los cargos comunitarios propios de los usos y costumbres.

Recordó haber compartido esta visión con el Secretario de Gobernación en días pasados, en el marco de las reuniones preparatorias para la Firma del Acuerdo Chihuahua en el cual participaron el gobierno de la República y los mandatarios actuales y electos. A cuarenta y cuatro días de asumir la primera magistratura del estado, Cué destacó la necesidad de participar decididamente en el Sistema Nacional de Seguridad Pública, porque aseguró: “La única forma de enfrentar las cosas en el país, deber ser en forma coordinada, armónica, con planeación y de manera profesional”.

“Nosotros hemos dicho que nuestra posición es coadyuvar en formar coordinada con el gobierno federal”, puntualizó.

Al referirse a su participación en la firma del Acuerdo Chihuahua el pasado 12 de este mes, Gabino Cué detalló los compromisos signados: “Evaluar mediante el sistema de control de confianza y con el apoyo del gobierno federal, la totalidad de los mandos superiores en seguridad pública y procuración de justicia. Asimismo, presentar el diagnóstico de la Unidad Especializada de Combate al Secuestro”.

De igual forma, refirió, los asistentes se comprometieron a presentar un calendario para realizar reuniones públicas, en las que se alcancen acuerdos que deben ser evaluados periódicamente, a más tardar en dos meses.

Los mandatarios deberán presentar entre otros el plan, con el diagnóstico y las necesidades de seguridad en cada entidad federativa, y el plan maestro de seguridad para prevenir y combatir la delincuencia, esto a más tardar en tres meses.

A pregunta expresa Cué comentó que faltan muchas cosas por hacer en el tema de seguridad y con este espíritu ha hecho llamados a redoblar esfuerzos juntos, gobierno y sociedad para enfrentarlo con éxito. Y también ha dado a conocer su legítima preocupación por el retraso en algunas acciones que corresponde a la esfera gubernamental en el estado que le tocará gobernar.

A este respecto puntualizó: “Lo importante no es polemizar, ni ha sido nuestra intención, nosotros nos estamos allegando información, porque a partir del primero de diciembre tenemos una gran responsabilidad que cumplir”.

El próximo titular del Ejecutivo hizo referencia a las estadísticas del Centro Nacional de Certificación y Acreditación, en las cuales se anota que sólo el 10 por ciento de la policía oaxaqueña ha sido evaluada.

Asimismo, a que de acuerdo con el informe del Sistema Nacional de Seguridad Pública presentado ante el Senado el pasado 21 de septiembre, en Oaxaca se ha ejercido sólo el 6 por ciento de un monto de 273 millones de pesos.

En respuesta a la pregunta sobre el conflicto que se vive en San Juan Copala, el gobernador electo apuntó que éste requiere de la mayor atención, y precisó: “Yo creo en el diálogo y la presencia formal de la instituciones, pero con el trabajo, yo no creo en soluciones de fuerza”.

Por ello, el próximo mandatario estatal insistió en la importancia de tender puentes de comunicación con las organizaciones sociales y comunitarias para generar las condiciones que permitan alcanzar la paz en zonas como Copala.

“A partir del primero de diciembre pondremos todo lo que esté a nuestro alcance para que vuelva la paz en esta zona, siempre con la mejor voluntad, atendiendo también los problemas de la marginación, la pobreza y el olvido”, indicó.