Unas diez calles del Centro Histórico de Oaxaca fueron cerradas a la circulación por no más de 50 padres de familia de la escuela Vicente Guerrero que exigen desde hace tres días la asignación de 14 maestros para la institución.
Desde la mañana de este miércoles secuestraron a un funcionario del Instituto Estatal de Educación Pública (IEEPO), que fue detectado mientras conducía un vehículo oficial. Los inconformes amenazaron con amarrarlo a un poste hasta que llegaran las autoridades.
Desde el lunes pasado, los padres de familia salieron a las calles, primero cerca de donde se ubica la escuela donde estudian sus hijos y decidieron extender su protesta a otras zonas cercanas, pero ante la falta de atención, la mañana de ayer decidieron bloquear calles aledañas al zócalo capitalino.
Los tutores encabezados por Alfonso Soriano indicaron que aparte de la asignación de los 14 profesores, piden la salida de otros cuatro, pues se oponen a la llegada de sus compañeros al considerar “que no reúnen los requisitos para ingresar a impartir clases”, por lo que los posibles candidatos simplemente regresan sin atender a los alumnos.
Miles de automovilistas han tenido que intentar llegar a su destino utilizando vías alternas, aunque la ciudad se ha partido en dos, debido a lo complicado que se tornó el tránsito en la zona.
Para este jueves, los padres de familia han advertido que bloquearán las entradas a la ciudad si el IEEPO no resuelve el problema.
Incluso, una mujer dio a luz a bordo de un automóvil particular en el Centro de Oaxaca, debido a que no pudo llegar al hospital a consecuencia de un bloqueo que padres de familia realizaban en el primer cuadro de la ciudad.
Malena Rafael González se desplazaba a bordo de un taxi con destino al hospital general, pero el tráfico ocasionado por el cierre de calles provocó que descendiera de la unidad en un intento por atravesar la protesta y alcanzar a llegar al nosocomio.
Sin embargo, los dolores de parto no le permitieron seguir caminando y un hombre descendió de su unidad de motor al ver que la mujer se retorcía de los dolores; con un raquítico conocimiento de primeros auxilios y dirigido por la misma señora, parió a un varón.
Una ambulancia llegó después de mucho esfuerzo y continuó con las atenciones a la madre y su hijo, que al final fueron canalizados a un hospital.