SAN RAYMUNDO Jalpan, Oaxaca, julio 10.- El presidente de la Comisión Permanente de Derechos Humanos del Congreso del Estado, Pavel López Gómez, anunció la elaboración de reformas al Código Penal para imponer la pena de castración química a los violadores y abusadores sexuales de menores de edad y pederastas.
El Legislador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) explicó que la “castración química” consiste en inyectar a un sentenciado por los delitos de abuso sexual, un fármaco elaborado con base en hormonas sintéticas, que disminuyen la intensidad y frecuencia del deseo sexual, además de que evita la erección y la eyaculación.
Detalló que la inyección de la hormona “Depo Provera” tiene la función de bloquear la producción de testosterona en los testículos durante seis meses, con una efectividad de 95 por ciento, dosis que al terminar el medio año debe repetirse para evitar un nuevo ataque del agresor.
El diputado López Gómez dijo el castigo para quienes cometen violación o abuso sexual no supera los 10 años de cárcel, por lo que este tipo de personas vuelven a reincidir en el delito.
En lo que va de este año 2011, se han presentado al menos cinco casos de abuso sexual y asesinato en contra de menores de edad, como el de la niña Alma Deysi Martínez Martínez, de 14 años de edad, ocurrido en mayo pasado en santa Cruz Xoxocotlán.
Otro caso es el ocurrido el 8 de junio en la comunidad de San Mateo Piñas, Pochutla, donde fue violado y asesinado el menor Gamaliel García López, de seis años de edad.
Hasta el momento, las penas impuestas a quienes cometen abuso sexual en contra de menores de edad no han sido lo suficientemente contundentes para frenar este delito.
La castración química se aplica desde 1969 en algunas partes del mundo, ya sea como pena o como tratamiento médico para violadores y pederastas, tal es el caso de Alemania, donde la castración química se aplica a violadores mayores de 25 años.
En el caso de Estados Unidos se aplica contra delincuentes sexuales en estados como Georgia, Oregón, Oklahoma, Wisconsin y Florida.
En este último estado, desde 1969 se tiene como obligatoria la pena de castración para los reos pederastas que alcanzan libertad condicional.
El Legislador perredista aclaró que no está en favor de la pena de muerte, pero sí de castigos ejemplares.
“Tiene que haber sanciones mucho mayores a los 40 años de prisión, hasta el extremo de llegar a la castración química de violadores de niños, mujeres y a todos los que abusen sexualmente de una persona”, insistió.
Señaló que “el Congreso del Estado se tiene que concientizar sobre las violaciones a los niños y hacia todo el mundo, porque no puede ser posible que estas personas sigan en las calles; por eso tiene que haber castigos más severos”.