SAN RAYMUNDO Jalpan, Oaxaca, agosto 30.- En el primer año de ejercicio legal de la sexagésima primera Legislatura no hubo agenda ni cohesión, sino que privó el desorden porque la Junta de Coordinación Política (JCP) no entendió sus facultades y eso no ha permitido las transformaciones jurídicas que esperan los oaxaqueños.
Así lo reconocieron los diputados de la mesa directiva Eufrosina Cruz Mendoza y Luis de Guadalupe Martínez, del PAN; Francisco Martínez Neri y Rosalinda Domínguez, del PRD; Zory Ziga Martínez y Javier Villacaña, del PRI; Ángela Hernández Solís, del Movimiento Ciudadano, y Flavio Sosa Villavicencio, del PT, en un informe sobre su primer año de trabajo.
Admitieron igualmente que aún existen temas pendientes y que “no han sabido estar a la altura de las expectativas ciudadanas”.
Afirmaron, sin embargo, que en la mesa directiva “hubo cohesión para conducir las sesiones y sacar adelante los retos inmediatos que requiere Oaxaca”.
El primero en hacer un ejerció de autocrítica fue el diputado Sosa Villavicencio, quien señaló que el Congreso del Estado, aún cuando tiene una mayoría coalicionista, “no ha logrado las transformaciones jurídicas que espera la gente, y los cambios a los que le apostaron han sido mínimos”.
Como integrante de la mesa directiva, argumento que ésta no pudo hacer mucho porque es un órgano administrativo, burocrático, que sólo se limitó a cumplir, al marcar la pauta en las sesiones.
Culminadas las 66 sesiones del primer año del ejercicio legal, pidió a sus 41 homólogos del PAN, PRD, PRI, PT, MC y PUP, “mirarse en el espejo de lo que la gente quiere y de la expectativa de cambio”.
Sostuvo que Oaxaca necesita mejorar su política social a fondo, “porque si no se fortalece con mejores leyes del rubro, en un corto plazo se van a tener serios problemas en las regiones porque la desigualdad social es creciente”, alertó.
Más severo en sus cuestionamientos, el panista Martínez Ramírez señaló que la Junta de Coordinación Política, integrada por los coordinadores parlamentarios del PRI, Martín Vázquez Villanueva; PAN, Juan Mendoza Reyes; PRD, Carol Antonio Altamirano; MC, Margarita García, y PT, Hita Ortiz Silva, “nos quedaron a deber una agenda legislativa y quedaron deber una cohesión”.
Aun cuando resaltó que el Poder Legislativo ya no está regido por una gran comisión que concentraban todas las facultades que rallaban en lo autoritario y no daban una función democrática al Legislativo, responsabilizo a la JCP del trabajo que no hay al seno del Congreso del Estado.
Dijo que de las casi 40 comisiones, por lo menos el 90 por ciento no trabaja, porque no ha emitido ni un sólo dictamen.
“Esto porque la Junta de Coordinación Política no ha sabido vigilar el trabajo, no ha sabido actualizar a los diputados, y en esto la mesa directiva carece de facultades, porque la Ley Orgánica no se las confiere”, señaló.
Martínez Ramírez demandó a los integrantes de la Junta de Coordinación reflexionar porque hay una falta de comunicación, coordinación, entre el Ejecutivo y el Legislativo.
“Todavía no encuentran su identidad, uno con el otro, cada quien por su lado creyéndose autónomos e independientes, y no son ni uno ni otro (porque) a la sexagésima primera Legislatura le tocó el inició de la transición, pero no se ha encontrado el equilibrio de poderes”, soltó.
Lamentó que el Congreso del Estado carezca de reglamento interno, el cual fue heredado, dijo, del PRI que ya no está, “por lo tanto resulta obsoleto”.
De esta carencia, el panista volvió a responsabilizar a la JCP “por no saber ser Junta de Coordinación, no ha entendido sus facultades y por eso el Congreso ha padecido un desorden y por eso no hay expectativas del electorado”.
Confió, no obstante, que en el segundo año se puedan sacar los cambios.
Más mesurada, la diputada Movimiento Ciudadano (MC), Ángela Hernández Cabrera, admitió que aún tiene pendientes en beneficio de la gente.
Pero aseguró que en la mesa directiva hubo cohesión para sacar adelante las leyes en beneficio de Oaxaca.
Por el PRI, el diputado Javier Villacaña Jiménez, coincidió con sus homólogos Sosa Villavicencio y Martínez Ramírez y admitió que no han rendido los frutos esperados.
La urgencia hoy, sostuvo, es hacer las leyes reglamentarias y secundarias de la reforma constitucional para que entre en vigor la modificación a la Carta Magna local.
Concedió también que el Congreso del Estado está inmerso en el tema político y como prueba, dijo, están los disensos entre los integrantes de cada una de las bancadas, “derivados de sus filias y fobias, porque en todos los institutos políticos hay jaloneos”.
En su oportunidad, Martínez Neri, Domínguez y Ziga Martínez pidieron una reunión entre la JCP con los diputados para revisar lo que el Congreso del Estado no pudo hacer.
“Solamente la autocrítica nos va a hacer trabajar y producir para Oaxaca”, consideró.
La diputada del PAN y presidenta de la mesa directiva, Eufrosina Cruz Mendoza, aseguró que jamás se violentó ningún artículo, ni un proceso legislativo.
“En el primer año se antepuso el amor a Oaxaca y la responsabilidad, a pesar de las limitaciones”, aseguró.
Todos los diputados prometieron no obstante, cumplir y cambiar el rostro del Congreso del Estado, porque con el cambio de régimen, desde el Congreso del Estado se tiene dotar de un engranaje legal a Oaxaca.
Al final, agradecieron todos a Eufrosina Cruz Mendoza que los integrantes de la mesa directiva hayan recibido un curso de “prácticas parlamentarias” y “conducciones de sesiones” en el Senado de la República.
