SANTA LUCÍA del Camino, Oaxaca, septiembre 4.- El policía segundo municipal de este Ayuntamiento conurbano a la capital del Estado, Jacobo García Vásquez, de 45 años de edad, se debate entre la vida y la muerte en el Hospital Civil de la capital por los golpes y cuchilladas que le propinaron la noche de este sábado seguidores del síndico-procurador, el perredista Omar Blas Pacheco.
Y es que el Gobierno del Estado solapa a ocho regidores que comanda Blas Pacheco, a quienes entrega dinero de los ramos 28 y 33, sin la aprobación del presidente municipal, Pedro Cabañas Santamaría, al grado de que este sábado el procurador general de Justicia del Estad, Manuel de Jesús López López, pretendía sacar al policía lesionado del nosocomio, en un intento por ocultar el hecho.
Mientras tanto, el Municipio de Santa Lucía del Camino vive en la ingobernabilidad, con dualidad de poderes, donde lo que manda Blas Pacheco es condenado por el edil Cabañas, y viceversa. Cada día la situación empeora, sin que el Gobierno del Estado opte por la institucionalidad.
Entre la noche del sábado y la madrugada de este domingo se suscitó un enfrentamiento entre policías municipales que responde al edil Cabañas y porros disfrazados de policías al mando del síndico-procurador Blas Pacheco, que dejaron a un herido de gravedad: el policía segundo Jacobo García Vásquez.
Con gas pimienta, palos y piedras, los policías-porros de Omar Blas intentaron desalojar a un grupo de colonos seguidores del Primer concejal que permanecían en la explanada del palacio municipal.
El enfrentamiento dejó al menos diez personas lesionadas, de las cuales dos son de gravedad porque requirieron hospitalización, entre éstos el policía Jacobo García y el director de Salud y Deporte, David Vásquez.
Veinte minutos después de la agresión arribaron al lugar granaderos de la Policía Estatal (PE) al mando del comisionado de Seguridad Pública, Roberto César Alfredo Cruz, quien rescató a los lesionados.
Un grupo de policías-porros salió huyendo del lugar, protegidos por Juan Carlos Pastrana Rodríguez, regidor de Agencias y Colonias, así como Luis Antonio Espinoza Osorio, regidor de Salud, quienes también participaron en el zafarrancho.
El presidente municipal, Pedro Cabañas Santamaría, condenó la agresión y responsabilizó del hecho al síndico Omar Blas Pacheco.
Solicitó al secretario de Seguridad Pública, Marco Tulio López Escamilla, que investigue, desarme y sancione a los presuntos policías municipales contratados por Omar Blas, a pesar de que no pasaron las pruebas de “control de confianza” y que, al parecer, trabajan bajo los efectos del alcohol y las drogas.
En fotografías fue captado el momento en que el regidor de Agencias y Colonias, Juan Carlos Pastrana, y un grupo de policías golpean y apuñalan al policía segundo, Jacobo García.
