MÉXICO, D.F., octubre 13.- El diputado federal oaxaqueño Eviel Pérez Magaña, presentó ante la Cámara de Diputados un proyecto de decreto para crear la Universidad Indígena de Oaxaca.
El objetivo es atender las necesidades educativas de miles de jóvenes oaxaqueños, pertenecientes a las 16 etnias del Estado, explicó el también presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Planteado como un organismo descentralizado, la Universidad también dará servicio a otros estudiantes, provenientes del sur y del centro de la república, con el compromiso de una educación de calidad que respete la cultura de cada etnia y trabaje por la supervivencia de las lenguas y culturas indígenas.
“Es necesario que el Estado mexicano, no solamente el gobierno en turno, vaya más allá de los enfoques asistencialistas de combate a la pobreza y genere condiciones de desarrollo sustentable para nuestros hermanos indígenas”, indicó Eviel Pérez Magaña.
Precisó que “la iniciativa no busca restarle espacios ni influencia a la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, sino complementar sus esfuerzos y llevar una oferta educativa especializada para los hijos de nuestras mujeres y hombres de las comunidades indígenas de Oaxaca”.
Afirmó que “México tiene una gran asignatura pendiente: no hay la suficiente inversión en educación y tecnología y esa insuficiencia, sumada a las deficiencias propias del sistema educativo, se refleja en los pobres resultados de nuestros alumnos en las evaluaciones internacionales, donde nuestro país va a la zaga”.
En la presentación del proyecto, Pérez Magaña señaló que la Universidad debe representar un primer paso para hacer frente a la enorme deuda que el país tiene con la educación de los grupos indígenas.
Estudios de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) y de la Universidad Autónoma de México (UAM) revelan que sólo 2 de cada 100 jóvenes de los pueblos indígenas estudia una licenciatura, y que sólo 5 de cada 100 ingresan al bachillerato.
Además, la Subsecretaría de Educación Pública del Gobierno federal estima que de los tres millones de alumnos de licenciatura, sólo 60 mil son indígenas, lo que representa un dos por ciento de la matrícula nacional, lo cual agrava más las diferencias en contra de nuestras comunidades originarias.