OAXACA, OAX., agosto 19.- Por más de 48 horas, militantes del Partido Movimiento Ciudadano (MC) antes Convergencia, siguen plantados a las afueras de las oficinas del instituto político ubicadas en Héroes de Chapultepec, con la encomienda de desistir en su movimiento hasta lograr la salida de Saúl Díaz Bautista.

“No somos enviados de nadie”, “A nosotros nos trajo el descontento de seguir en este partido que les está sirviendo a muchos para llegar al senado y diputaciones federales y a nosotros que”, exclaman militantes provenientes de la región de la Mixteca.

Aquí exigimos transparencia y rendición de cuentas, exclamaron los inconformes que desde la noche del pasado viernes tomaron las oficinas al ver que su dirigente Saúl Díaz pensaba llevarse las computadoras y mobiliario de sus oficinas naranjas ubicadas sobre la Calzada Héroes de Chapultepec ubicadas muy cerca del hospital del Seguro Social.

Karina Piche Ruiz integrante de la Comisión Operativa del partido manifestó que de manera autoritaria Saúl Díaz Bautista a quien desconoce como dirigente, trata de saquear el partido llevándose mobiliario y computadoras sin dar aviso a ningún órgano directivo, hecho que detectado horas antes de la toma de las oficinas, por lo que los militantes lo único que pudieron hacer es pintarrear el hurto de su dirigente.

Es un enojo generalizado de los militantes del partido naranja, ya que desde las candidaturas el mismo Senador electo Benjamín Robles Montoya ha tratado de vender al mejor postor el partido cuando fue el único que le dio el respaldo pues los perredistas y petistas le dieron la espalda.

Por eso desconocemos a Díaz Bautista porque más le ha interesado el dinero que le da Benjamín Robles para sus intereses que el apoyo para quienes se fregaron en la campaña, “no ha rendido cuentas por más de un año y ha violado reiteradamente los estatutos para fines personales y los que le ordena Robles Montoya quien ahora pretende meter a perredistas para colocarlos en las próximas elecciones locales del 2013.

Piche Ruíz calificó como una porquería lo que Benjamín y Saúl pretenden hacer del partido, por eso se instalaron en plantón en el edificio en donde se observan mantas y consignas exigiendo la salida del dirigente.