OAXACA, OAX., septiembre 13.- En apoyo a las protestas que mantiene la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en la Ciudad de México, tras ser desalojados por la Policía Federal (PF), integrantes del Frente Único de Lucha para la reconstrucción de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (FUL-APPO) iniciaron protestas en calles y cruceros de la capital estatal, además de sitiar el Palacio de Gobierno y en general el Zócalo, al grado que hasta retuvieron por unos minutos a tres elementos de la Policía Estatal e increparon al comisionado César Alfaro Cruz.

Durante la mañana de este viernes, las indígenas triquis que mantenían un plantón en el corredor derecho del Palacio de Gobierno se replegaron y de inmediato la Policía Estatal implementó un operativo de seguridad en torno a los pasillos de la sede del Poder Ejecutivo estatal con vallas metálicas.

Simultáneamente, militantes y simpatizantes del FUL-APPO reforzaron su protesta y el plantón que mantienen frente al Palacio de Gobierno.

Los activistas coincidieron con el ensayo que elementos del Ejército Mexicano y la Banda de Música de la Policía Estatal realizaban, con motivo de las actividades conmemorativas del Grito de la Independencia este 15 de septiembre y el desfile cívico-militar del 16 de septiembre.

Con gritos de “en Oaxaca la reforma no pasará” los miembros del FUL-APPO se mantuvieron a la distancia y no se suscitó ningún roce.

Poco después del mediodía, cuando se enteraron que la Policía Federal cercaba el plantón de la CNTE en el Zócalo de la capital de la República, previo al desalojo, los activistas oaxaqueños se reagruparon y en marcha se enfilaron por la avenida Morelos, División Oriente y Niños Héroes hasta llegar a la sede de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión (Cortv), donde exigieron les dieran espacios en los noticieros de radio y tv para difundir sus consignas y mensajes en apoyo a sus compañeros de la Sección 22 del SNTE.

Paralelamente, bloquearon el crucero del Cerro del Fortín, a la altura del Monumento a la Madre. Esta acción generó un severo caos vial en el Centro Histórico, en virtud de que Tránsito Municipal cerró la circulación desde el crucero de la avenida Venus.

Otro contingente de appistas encabezado por el activista Marcelino Coache Verano marchó por esas mismas calles en apoyo al Magisterio.

Al final, todos se reagruparon y se concentraron en el Zócalo capitalino, frente al Palacio de Gobierno.

Ahí, los integrantes del FUL-APPO tomaron los accesos a la sede del Poder Ejecutivo estatal, que por la mañana habían desocupado las indígenas triquis, y retiraron las vallas metálicas que había colocado la Policía Estatal.

Con esta acción, el cuerpo de seguridad del palacio cerró las puertas y de inmediato se originó un conato de violencia con elementos policiacos que se negaban a entregar los pasillos.

Encapuchados y armados de palos, los appistas quitaron las vallas que permanecían en el corredor y quitaron una cámara de seguridad que se encontraba en el lugar.

En respuesta, la Policía Estatal lanzó gas lacrimógeno para dispersar a los inconformes. Sin embargo, en el conato de bronca tres elementos fueron retenidos por los del FUL-APPO.

Por instantes, los activistas también retuvieron e increparon al comisionado de la Policía Estatal, César Alfaro Cruz, quien desde la mañana se encontraba en los corredores del palacio. Enardecidos, reclamaban al jefe policiaco la presunta retención de un maestro al interior del Palacio de Gobierno.

Sin aspavientos, el Comisionado de la policía dialogó con los inconformes y negoció la liberación de los tres elementos policiacos, un celular y cartuchos nueve milímetros.

Los hechos no pasaron a mayores por la intervención pacifica del mayor César Alfaro Cruz. Ya en entrevista, éste detalló que a uno de sus elementos lo golpearon y será él quien determine si interpone denuncia o no, en virtud de que se trata de un derecho “personal y no institucional”.

Indicó que la molestia de los integrantes del FUL-APPO obedeció a que al cerrase las puertas del Palacio de Gobierno quedó adentro el profesor Fernando Méndez Meza, quien fue entregado a cambio de los elementos detenidos, entre ellos el comandantes Guillermo Luna Gálvez.

Apaciguados los ánimos, la Policía Estatal se replegó, pero los activistas incrementaron sus acciones y sitiaron el Zócalo capitalino con las vallas metálicas de la policía.

Más tarde tomaron seis autobuses de transporte urbano para colocarlos en las calles adyacentes al Palacio de Gobierno: Bustamante y Guerrero, así como Trujano y Flores Magón.

El portavoz del FUL-APPO, José Álvaro Carrillo, anunció que mantendrán su plantón de forma indefinida en apoyo a sus compañeros de la Sección 22 de la CNTE, que fueron desalojados del Zócalo de la Ciudad de México, por su negativa a despejarlo pacíficamente.

El activista advirtió que incrementarán sus acciones de protesta en contra de las iniciativas de reforma hacendaria, energética y la reforma educativa que fue aprobada por el Congreso de la Unión y entró en vigor en todo el país, tras su publicación por el presidente Enrique Peña Nieto.