SAN RAYMUNDO Jalpan, Oaxaca, noviembre 12.- “No fue una gran negociación, por qué aprobar. El acuerdo fue que hasta que no nos depositaran no íbamos a bajar (a sesionar)”, soltó sin recato la diputada neopanista Marlene Aldeco Reyes Retana.

Y de inmediato la secundó, sin desfachatez, la diputada “independiente”, ex del MC, Margarita García García: “Sigo en la lógica que esperemos hasta que nos depositen; desafortunado que no vayamos; nos la rompimos para conseguir para todos, hasta para el PRI”.

Así, una a uno, los casi ex diputadas y ex diputados del PAN, PRD, PT, MC y hasta del PRI que este miércoles 13 de noviembre culminan su mandato constitucional, luchaban la noche del lunes 11 de noviembre para no irse sin antes exigir al subsecretario de Egresos de la Secretaría de Finanzas, Jorge Carbonell, el pago proporcional de su salario y/o el pago del mes completo de noviembre.

Eran las 23:00 horas del lunes 11 y todos y todas estaban concentrados en las oficinas de la Tesorería del Congreso del Estado, donde por acuerdo mayoritario increpaban a Jorge Carbonell y exigían que se les transfiriera ya 60 millones de pesos que les adeuda de presupuesto, el cual sería utilizado para el finiquito de los diputados y sus asesores.

Los 60 millones de pesos adeudados a los diputados era lo que en realidad trabó la reanudación de la última sesión extraordinaria del pleno de la LXI Legislatura, iniciada desde el viernes pasado, pero recesada ante los incumplimientos del secretario de Finanzas, Enrique Arnaud Viñas.

Prevista para reanudar a las 17:00 horas del lunes 11, la sesión se entrampaba conforme pasaban las horas, y provocaba más ira de los diputados coalicionistas, quienes en su defensa acordaran no sesionar hasta que no les depositaran los millones pendientes.

“Bajemos y veamos Ley de Transporte”, apelaba el panista Joel Isidro Inocente.

Es que ya mermados por las prolongadas y cargadas discusiones con el Subsecretario de Egresos, la coalición PAN-PRD-PT-MC se había fragmentado ante el “cabildeo” y “convencimiento” del panista Guadalupe Isaac Rodríguez Soto –futuro subsecretario de Finanzas– para que se cubrieran los adeudos a sus compañeros legisladores.

Pero en sus intentos por operar en favor de la Secretaría de Finanzas, enrolado como casi funcionario, el oficioso Rodríguez Soto fue vapuleado por sus homólogos.

“Hay gente que está operando en favor del gobierno”, criticaba el coordinador de los diputados del PAN, Juan Mendoza Reyes. No obstante, reconocía que “se sacó para todos” y confió en que “sí lo van a depositar”.

Los coalicionistas arremetían también contra el ex presidente de la Junta de Coordinación Política y ahora flamante titular de la disminuida Secretaría de Desarrollo Social y Humano (Sedesoh), Alejandro López Jarquín, por operar en su contra.

De paso, la emprendían igualmente contra la coordinadora de la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo (PT), Hita Beatriz Ortiz Silva, “porque en sus negociaciones, además de desistirse en exigir recursos pendientes, durante tres años cobró como directora de Recursos Humanos, no entregó los recursos a los integrantes de la bancada petista y cobró puntualmente su dieta como legisladora”.

“Hita (Ortiz Silva) es la más mercenaria”, enjuiciaba la “independiente” Margarita García García, en una de sus acostumbradas andanadas de críticas y reproches en contra de los diputados y diputadas que no la apoyan como mujer y que no mantuvieron la “cohesión” para exigir que Finanzas cumpliera con los depósitos interbancarios.

Similar señalamiento hizo Margarita en contra del diputado Perfecto Mecinas Quero, de quien dijo que en un año ganó una importante suma de dinero como coordinador de la bancada del MC.

García García fue la de los reclamos airados, al grado que antes de ingresar a la Tesorería del Poder Legislativo azotó las puertas de cristal para abrirse paso e intentó azuzar a sus homólogos para retener al personal de Finanzas, lo que obligó a que esa oficina fuera resguardada por elementos de seguridad.

Entonces, el diputado petista Pavel López Gómez –que ahora sí se presentó en su centro de trabajo– planteó bajar a sesionar o en su caso reanudar hasta el martes, pero en acuerdo conjunto.

Por su parte, la neopanista Aldeco Reyes Retana lamentó que no haya habido una “buena negociación” con el titular del Poder Ejecutivo estatal para cerrar el ciclo de la LXI Legislatura.

Atenta escuchaba la también legisladora “independiente”, ex del PAN, Martha Patricia Campos Orozco, quien igualmente exigía sus recursos económicos pendientes.

Flavio Sosa Villavicencio, del PT, insistió en bajar para iniciar la sesión y sacar únicamente la Ley de Transporte, y así, minutos después de la media noche, la mayoría de legisladores bajó al recinto para reanudar la sesión a las 00:40 horas del martes 12 de noviembre.

Los del PRD: Leticia Álvarez Martínez, Carlos Martínez Villavicencio, Tomás Basaldú Gutiérrez, y Héctor Lorenzo Inocente, del PAN, quienes también airadamente reclamaban su “bono” de retiro, al final desistieron de sus reclamos por “convencimiento” de López Jarquín, con la promesa de “ser tomados en cuenta” en la Sedesoh.

Frente a los reclamos, el subsecretario de Egresos de la Secretaría de Finanzas, Jorge Carbonell, sólo endurecía el rostro y apenas atinaba a argumentar que, además del Congreso del Estado, se adeudaba recursos presupuestados a diversas dependencias.

Por su parte, los legisladores del PRI no hicieron mucho aspaviento. Llegaron a acuerdos prontos con el representantes de Finanzas y se dispusieron a sesionar hasta el final.

Se supo que pactaron con Carbonell que de los 60 millones de pesos adeudados, se les transfirieran 17 millones para salir de los compromisos con el “gasto corriente”.

Con este acuerdo a medias, a las 00:40 horas del martes 12 de noviembre de 2013, los diputados y diputadas de la feneciente LXI Legislatura del Estado iniciaron lo que sería su última sesión plenaria para aprobar la Ley de Transporte y rechazar la creación de la Secretaría de la Mujer.

Terminaron a las 03:05 de la madrugada, y dejaron para la tarde la elección y toma de protesta del nuevo Procurador General de Justicia del Estado, pero ya no hubo la convocatoria a otro período extraordinario de sesiones. Cinco mujeres de la Diputación Permanente se encargaron de culminar su trienio.