OAXACA, OAX., julio 12.- Con una calenda y la presencia del arzobispo José Luis Chávez Botello, quien presidió la eucaristía, la Iglesia católica celebra este sábado el 281 aniversario de la consagración de la Catedral Metropolitana y la virgen de La Asunción.
En entrevista, el párroco del Sagrario Metropolitano, sacerdote Carlos Franco Pérez Méndez, informó que se tuvo esa gracia después de haber concluido la mayor parte de la reconstrucción de los daños ocasionados por diversos sismos registrados en tiempos distintos.
A estos trabajos se agregó la remodelación del viejo edificio de cantera verde, que fue algo muy significativo porque una vez concluidos se realizó la consagración de la Catedral y también se consagró a la Virgen de La Asunción.
Y para celebrar este acontecimiento, la Iglesia católica organizó una calenda con la presencia de chinas oaxaqueñas y una banda de música, que a las 17:00 horas de este sábado partirá de la Catedral Metropolitana, llegará al Carmen Alto, bajará por la calle de García Vigil y arribará al Zócalo de la Capital del Estado de Oaxaca.
¿Qué trascendencia tiene esta celebración para la Iglesia católica?
–La Catedral Metropolitana es sede del Arzobispado, es la iglesia madre de todas las demás iglesias de la Arquidiócesis, es como la mamá de todas las parroquias y, por lo tanto, tiene que sobresalir por su liturgia, por el trabajo pastoral, tiene que ser modelo en la catequesis y en toda la pastoral.
El sacerdote Carlos Franco Pérez Méndez explicó que en la consagración se colocan y encienden 12 velas distribuidas en todo el templo, que simbolizan a los 12 apóstoles de Jesús, que son pilares de la Iglesia católica.
Refirió que sobre ellos se funda y son los que sostienen con su palabra, con su ejemplo, con su vida, a la iglesia de Jesucristo, ya que dentro de la liturgia es algo especial.
¿La Catedral Metropolitana es el principal templo católico de Oaxaca?
–Ni Santo Domingo con toda su grandeza, ni la Basílica de la Virgen de la Soledad pueden equipararse a lo que es la Catedral, porque aquí está la sede del Obispo, la catedral del Obispo; es aquí donde el obispo dirige y preside la eucaristía en nombre de los oaxaqueños, aquí está la máxima autoridad eclesiástica.
Esta celebración debe realizarse cada año, pues anteriormente no se llevaba a cabo, dijo el clérigo y ofreció que en lo sucesivo “vamos a celebrar cada año este acontecimiento, con pasitos graduales y progresivos para mejorar el acontecimiento religioso-espiritual”.