OAXACA, OAX., septiembre 22.- El Consejo Consultivo de los Pueblos Indígenas y Afromexicano de Oaxaca, acusó este lunes que la reforma constitucional sobre Derechos de los Pueblos Indígenas y Afromexicano no ha sido aprobada por temor, prejuicio y doble ignorancia del Poder Legislativo estatal.
Por ello, antes de que concluya el segundo período ordinario de sesiones correspondiente al primer año de ejercicio constitucional de la LXII Legislatura del Estado, el organismo exigió a las y los diputados aprobar la iniciativa de ley correspondiente.
“El miedo, los prejuicios y la ignorancia han impedido que la iniciativa sea avalada, pero los pueblos originarios somos responsables y sabemos respetar y ceñirnos al marco legal”, dijo el rector de la Universidad de la Tierra y promotor de la propuesta, Gustavo Esteva.
El especialista explicó que la iniciativa que fue elaborada por el Consejo Consultivo “no en un gabinete; fue mediante una consulta a los pueblos originarios”.
Lamentó que la propuesta de reforma constitucional encuentre una serie de obstáculos que reflejan doble ignorancia y criterios racistas y coloniales por parte de quienes siguen manifestando una forma y una actitud hacia los pueblos indígenas que desconocen las actuales corrientes del derecho e instituciones.
Por su parte, Marcos Leyva Madrid, director de Educa, confió en que exista voluntad política del Congreso del Estado para avanzar en el proceso de transición que vive Oaxaca.
“No es otra cosa que desmontar un modelo y sistema para que se vaya generando un cambio entre gobierno y sociedad; hoy es una oportunidad para reconocer a los pueblos y comunidades indígenas”, dijo y adelantó que ante el desempeño del Congreso estatal frente a la reforma constitucional el Consejo Consultivo tomará una serie de acciones jurisdiccionales.
A su vez, Carmen Santiago Alonso, de la agrupación “Flor y Canto”, advirtió que en caso de no aprobarse la iniciativa en cuestión antes de que finalice el primer año de ejercicio legal de la LXII Legislatura, tomarán otras medidas de la mano de organizaciones sociales y movimientos indígenas.
Refirió que el proyecto de iniciativa fue entregado al Congreso del Estado el 21 de marzo pasado, luego de dos años de preparación, a través de una serie de foros y consultas.
Santiago Alonso sostuvo que a pesar de las bondades y beneficios de la reforma en la construcción de un Estado multicultural, “sabemos que existen actores que buscan obstaculizar su aprobación, como ha ocurrido en otros momentos de la histórica lucha por nuestros derechos”.
Igualmente, consideró que a los legisladores “los motivan miedos y prejuicios ya superados en el pasado reciente, en el sentido de que nuestros pueblos pretenden crear un Estado dentro del Estado de Oaxaca, pero nada más falso, ya que hoy una vez más afirmamos que somos indígenas, oaxaqueños y mexicanos y así deseamos seguir siendo”.
Lamentablemente, dijo, son estos intereses adversos los que se niegan a aceptarnos plenamente y pretenden alejarnos de una sociedad pluricultural, diversa, justa y democrática.
Sin embargo, los impulsores apelaron a la sensibilidad y compromiso de las diputadas y diputados de la LXII Legislatura para que aprueben la reforma constitucional sobre los derechos de los pueblos indígenas y afromexicano en el actual periodo de sesiones.
A propósito de la celebración de la Conferencia Mundial sobre los Pueblos Indígenas, en el 69 periodo ordinario de sesiones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el Consejo Consultivo consideró que el Congreso estatal está obligado armonizar las normas nacionales e internacionales relativas a los derechos de los pueblos indígenas, en particular los artículos 1 y 2 de la Constitución federal, el Convenio 169 de la OIT y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
Gustavo Esteva opinó que Oaxaca puede poner el primer ejemplo de armonización legislativa de esta dimensión a nivel mundial y dar un paso en la construcción de una sociedad más incluyente, democrática y justa, mediante la atención plena de los derechos de los pueblos indígenas.
“La reforma que está en manos de los diputados cumple con los legítimos anhelos y aspiraciones de vida de nuestros pueblos y comunidades, ya que marca el respeto y reconocimiento de nuestras culturas, defiende la diversidad, fortalece la cosmovisión indígena y protege la relación armónica con la naturaleza”, aseguró.
Asimismo, establece un marco de protección y garantías de derechos colectivos, fortalece la identidad y construye el entramado necesario para el ejercicio eficaz del derecho de libre determinación de los pueblos, sin detrimento de la unidad mexicana y oaxaqueña.
Igualmente, fortalece la estabilidad política, garantiza la paz social y el desarrollo de nuestros pueblos, creando las condiciones necesarias para revertir las actuales condiciones de pobreza, marginación, exclusión y discriminación en que vive la mayor parte de nuestra población, subrayó el especialista.