OAXACA, OAX., febrero 24.- Protesta inédita. Personal del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) colocó sobre las esculturas metálicas del artista plástico Fernando Andriacci un pizarrón con el menú de la cafetería de esa institución que hasta hace un mes tutelaba el pintor Francisco Toledo.
La acción, implementada a partir de este lunes 23 de febrero, es en protesta por la colocación de tres esculturas metálicas del artista originario de Cuicatlán frente a la sede del IAGO, sobre el Andador Turístico “Macedonio Alcalá”.
Sin inmutarse ni interrumpirla observó la acción el artista plástico originario de Juchitán de Zaragoza, mientras la escena era también observada por las personas que pasaban por el lugar.
Una mujer que no dio su nombre, de tez clara y cabello rubio, justificó la protesta al asegurar que las esculturas de Andriacci “rompen con la armonía arquitectónica del templo de Santo Domingo de Guzmán”.
Francisco Toledo sólo observó y de inmediato se retiró del lugar que ahora tutela el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), luego de venderlo por la cantidad de 1 peso a ese organismo cultural del gobierno federal.
Horas más tarde, el mismo personal del IAGO retiró el menú de comida de la escultura metálica de Andriacci, y en su lugar colocó el oficio que el 24 de octubre de 2014 envió la titular del INAH, María Teresa Franco, al pintor Toledo.
El documento refiere que ha instruido al Director del Centro-INAH Oaxaca para que firme un acuerdo federal con el gobierno municipal capitalino, a fin de que “no instalen esculturas u otro tipo de mobiliario en las calles del Centro Histórico”.
Por ello, personal del IAGO protestó contra la instalación de las esculturas del joven pintor, originario de Cuicatlán, en el Andador Turístico del Centro Histórico.