OAXACA, OAX., marzo 30.- En el Istmo oaxaqueño de Tehuantepec los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) tienen documentados 78 casos de Chikungunya, el virus que transmiten los mosquitos del género Aedes, informó el subsecretario de Salud, doctor Maurilio Mayoral García.
Sin que los casos detectados sean para alarmar a la población, el galeno dijo que los pacientes se mantienen protegidos con mosquiteros para evitar que la llegada de otro vector afecte a otras personas.
Refirió que estuvo en la zona fronteriza con el vecino estado de Chiapas, visitando diferentes municipios, como Chahuites, donde las autoridades están interesadas en la contención de la enfermedad y han actuado en consecuencia asumiendo su responsabilidad.
En entrevista, el funcionario aclaró que a pesar de que los SSO han documentado 78 casos, “es importante que la gente sepa que no toda fiebre acompañada de erupciones y dolores articulares es Chikungunya”.
Detalló que esta enfermedad es originaria de África y migró hacia el Caribe y después a todo el Continente Americano, pasando por Centroamérica. “Se trata de un virus muy parecido al que provoca el síndrome febril parecido al Dengue”, dijo.
Como característica especial y particular, el Chikungunya causa dolores articulares que duran un tiempo prolongado, lo que puede producir incapacidad temporal.
Mayoral García aclaró que “no es tan peligrosa ni letal como el Dengue, pero causa mucha discapacidad, aumentando la demanda en primeros niveles de atención médica, como ha ocurrido en países del Caribe y Centroamérica”.
Refirió que “al Chikungunya lo esperábamos en México desde el año pasado; se sabía que iba a entrar por Chiapas, donde desafortunadamente hay un conjunto de condiciones sociales, económicas y de tipo cultural que hacen que los reservorios –depósitos de agua– no sean tratados de manera adecuada, dando como resultado que aparezca y prolifere el mosco que causa el Dengue.
Detalló que estos mosquitos pican a una persona y de ahí empiezan a transmitir la enfermedad, especialmente en lugares donde la gente está acostumbrada a guardar el agua en cubetas o pequeños depósitos expuestos al aire libre.
Dijo que cuando hay reservorios es muy difícil evitar una transmisión, como la que se ha dado en la región del Istmo de Tehuantepec, lo que podría eliminarse si se usara el abate, pero no se usa porque consideran que no tiene buen sabor; es un problema de orden social y cultural, indicó.
El Subsecretario de los SSO aconsejó “no automedicarse, porque se puede enmascarar no solamente el Dengue, sino otro tipo de enfermedades”.
Aclaró que en el caso del Chikungunya “su manifestación es fiebre y si le damos tratamiento sintomático, sin saber la causa, estamos enmascarando la sintomatología de una enfermedad que puede ser más grave, por ejemplo fiebre tifoidea, brucelosis o infecciosis y las enmascaramos cuando la persona se automedica”.
De ahí la importancia de acudir a un Centro de Salud o con un médico que indique cuál es el caso, señaló Mayoral García y advirtió que “lo peor es no comunicar”.