OAXACA, OAX., julio 24.- Recopilador y arreglista de los “Sones y Jarabes de Betaza”, el Teniente Coronel Músico José Ventura Gil recibirá un merecido homenaje por su amplia trayectoria artística, este domingo en el Teatro Macedonio Alcalá, por parte de la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca (Seculta).

Ventura Gil nació en el municipio de San Melchor Betaza, en la Sierra Norte de Oaxaca, en 1936. Aprendió las primeras notas de su padre, Gerardo Ventura Pérez, cuando a los ocho años se integró a la banda que éste dirigía.

El posterior fallecimiento de su progenitor, no impidió que Ventura Gil continuara su aprendizaje y llegó a ser tan bueno que con tan solo 14 años de edad las autoridades de su comunidad lo nombraron director de la banda local.

En 1955, Ventura Gil se trasladó al municipio de Estancia de Morelos, en el distrito Mixe, donde formó una nueva banda con la experiencia adquirida en Betaza. “Ya me sentía seguro porque ya sabía qué era ser un director de responsabilidad, conducir una banda, me sentía contento”, señala el serrano.

Dos años más tarde, en 1957, fue recibido por la Banda de Música del Estado de Oaxaca, y se trasladó a la capital de esta entidad para ser alumno del maestro Diego Innes en la Escuela de Música de Bellas Artes.

Ese mismo año, y con ayuda del también betaceño Ceferino González, hizo una recopilación de antiguos sones serranos y les agregó dos de su autoría —“El mayordomo” y “La novia y el novio”— para crear los “Sones y Jarabes de Betaza”, que desde entonces acompañan a la delegación de esa comunidad en la Guelaguetza de los Lunes del Cerro.

“Anteriormente en las fiestas del Lunes del Cerro participaba la delegación de Betaza, pero bailaban al estilo del pueblo, sin evoluciones, sin pasos sin nada, entonces lo que hicimos fue ponerle sus evoluciones, sus pasos y hacer una recopilación de esos sones”, comenta Ventura Gil.

Esta recopilación se ha convertido en una de las más representativas y queridas no sólo de la Sierra Norte, sino de todo Oaxaca. “Me siento muy orgulloso y el pueblo de Betaza, como sabe que esos sones están reconocidos mundialmente, me tiene aprecio”, dijo.

Una vez concluida su participación con la Banda de Música del Estado, en 1962 Ventura Gil regresó a su región para compartir generosamente sus conocimientos, fundando bandas y perfeccionando las técnicas de otras en numerosas comunidades de la Sierra.

“No había bandas de música, entonces yo iniciaba así una especie de iniciación artística. La autoridad me decía ‘le doy un año para que me entregues la banda’ y yo me apuraba a enseñarles para que al año ya tocaran y al año ya se los entregaba tocando”, recuerda el Teniente Coronel.

“Me dejó una satisfacción muy grande, hasta la fecha los pueblos me quieren, me reconocen mucho, eso es lo que gané, la amistad de los pueblos”, dice Ventura Gil sobre lo que le dejó aquella experiencia y agrega que “entre más enseña más aprende uno”.

En 1968, por consejo de Diego Innes, Ventura Gil se trasladó a la Ciudad de México para continuar sus estudios musicales y en julio de ese mismo año ingresó al Ejército Mexicano causando alta en la Banda de Música de la 2ª Banda de Infantería.

Así empezó a crear su carrera, donde fue director de las siguientes agrupaciones: Orquesta de Baile de la Secretaría de la Defensa Nacional, Banda de Música del Primer Cuerpo del Ejército y, a partir de 1990, fundador y director de la Banda Sinfónica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana, institución de donde se retiró en 2009 como Teniente Coronel Músico, grado máximo que alcanza un filarmónico dentro de la milicia.

Ventura Gil no sólo ha sido músico, maestro y director, también es un prolífico compositor con casi 100 obras, entre sones, valses, pasos dobles, marchas y boleros, entre otros.

“Todas me gustan, pero hay una que me gusta más que se llama ‘Niña hermosa’, es una canción vals que le compuse a mi hija cuando nació”, comenta.

El compositor dice encontrar su inspiración en la cotidianidad: “pongo atención en cómo son las cosas, los bosques, los aires, los murmullos del río, que son pistas que le dan a uno, por decirlo, una olla de frijoles que está hirviendo, de ahí saca uno la música, pero no toda la música sino una pista de dos o tres compases, ya de ahí saca uno las composiciones”.

Aunque Ventura Gil ya se retiró del Ejército, continúa con el acompañamiento que desde hace 57 años hace a la delegación de San Melchor Betaza, tanto al dirigir a la banda durante su presentación como en los ensayos previos.

Sobre el homenaje que se le realizará el domingo, dice: “me siento contento, muy feliz porque nunca me  habían hecho un homenaje así, en el Teatro Macedonio Alcalá, que es un lugar muy importante para mí y todos los oaxaqueños”.

Ventura Gil afirma sentirse satisfecho con su vida y sus logros. “Les estoy dejando mis conocimientos, les estoy dejando mis recuerdos, uno no toda la vida va a vivir, entonces yo trato de inyectarle a la gente, a los músicos, una educación en la música para que se preparen y sigan adelante”, concluye.

El homenaje al Teniente Coronel José Ventura Gil se realizará este domingo 26 de julio a las 19:00 horas en el Teatro Macedonio Alcalá, donde se le entregará un reconocimiento y un concierto a cargo de la Banda de Música del Estado.

La entrada es gratuita.