OAXACA DE JUÁREZ, Oaxaca., octubre 26.- “El halloween es un atentado a nuestra cultura; desafortunadamente los profesores lo han promovido desde las aulas”, increpó Jaime Katz Morales, secretario de Turismo del Ayuntamiento capitalino.

“Afecta a la cultura oaxaqueña, a nuestras tradiciones ancestrales, a las festividades por los fieles difuntos”.

Del 31 de octubre al 2 de noviembre, el Panteón San Miguel de la capital del estado, con sus tres mil 250 nichos y su arquería despampanante que reúne más de cien arcos los cuales se conjugan con el diseño curvilíneo en miniatura de cada una de las bóvedas que alojan las cenizas de los difuntos, será bellamente iluminado a fin de recibir a miles de visitantes nacionales y extranjeros.

Cerca de las tumbas de los hombres ilustres se presentará la obra de teatro “La Muerte”; entre flores, velas y ofrendas.

En diferentes sedes de cada una de las 13 agencias municipales de Oaxaca de Juárez se colocarán altares representativos de las distintas regiones del estado, como por ejemplo, en el Centro Cultural San Pablo.

“Lo anterior sin afán de ponerlos a competir. Un altar, por muy modesto y sencillo que sea tiene el mismo valor que aquéllos que rebozan de productos, y debe tener nuestro aprecio y respeto”, comentó Katz Morales.

Las calles de Gurrión se dedicarán al tema “El chocolate y el molinillo”, con la participación de habitantes de Rayón que se han caracterizado por fabricar este utensilio para batir el producto del cacao. Habrá degustación de chocolate calientito, de agua y de leche, pan recién horneado y espectáculos.

La festividad de Día de Muertos en Oaxaca es un motivo para recibir a familiares y turistas que llegan a disfrutar la gastronomía típica y a visitar templos y camposantos de la entidad, además de activar la economía local que se viste de flores coloridas, antojitos, postres y calaveritas de azúcar y de chocolate, entre el aroma del copal en incensarios artesanales de Santa María Atzompa.