SAN RAYMUNDO JALPAN, Oaxaca, noviembre 16.- Todo inició por un mensaje “amenazador” que vía teléfono celular enviaron los diputados del “bronx” priista, Fredy Gil Pineda Gopar y Gustavo Díaz Sánchez, a su homólogo del PSD, Manuel Pérez Morales, para amedrentarlo por cuestionar el procedimiento de selección de los nuevos ocho integrantes de la Mesa Directiva y la instalación de la LXII Legislatura para su tercer y último año de ejercicio constitucional.
La sesión extraordinaria atropellada de este sábado 14 de noviembre de 2015 –un día después de lo previsto por la Ley Orgánica del Poder Legislativo– había iniciado como es costumbre de esta LXII Legislatura: con casi dos horas de retraso, a las 13:45. Las y los diputados habían sido citados a las 12:00 horas.
Cuestionamientos, justificaciones y reproches de los diputados del PAN, PRD y PRI privaron durante más de 30 minutos.
“Le pedimos a los diputados Jesús López, Natividad Díaz y Alejandro Avilés que tomen acuerdos con inteligencia. Exhíbanse ustedes, pero no exhiban a todo el Congreso”, reclamó Pérez Morales.
En respuesta recibió de Pineda Gopar y Díaz Sánchez un mensaje para amenazarlos –el contenido fue reservado–.
“De verdad me gustaría que lo argumentaran en tribuna compañeros. No se vale con valentonadas mentar. Súbete y argumenta, ni con amenazas. Yo si estoy señalando”, dijo y mostró su teléfono celular, pero no el contenido.
Y de las amenazas y reclamos pasaron a retarse a golpes. Pérez Morales señaló a Díaz Sánchez y Pineda Gopar.
En segundos, Pérez Morales se levantó de la Mesa Directiva y Pineda Gopar hizo lo propio y se enfiló al pasillo izquierdo del recinto para liarse a golpes con el “pesedista”, pero Pérez Morales rectificó y de inmediato retornó a su silla.
Desde el acceso derecho, Pineda Gopar soltó sin empacho, muy al estilo aprendido desde que era porro en la UABJO: “Pinche puto”.
La escena provocó morbo entre los espectadores en las gradas y la mirada atónita de los y las diputadas del PAN, PRI, PRD, PUP, PT y MC.
Sin pudor ni rubor, visiblemente encendido en sus ánimos, Pineda Gopar regresó a su curul con toda su humanidad a cuestas, y desde ahí lanzaba la mirada retadora a Pérez Morales, quien sólo se quitó la cortaba y se desabrochó un botón del cuello de su camisa.
Vino la votación para elegir a los integrantes de la Mesa Directiva y al tocar turno a Pineda Gopar se acercó a Pérez Morales y le aventó una tasa que estaba en la misma mesa. El pesedista lo ignoró.
Nuevamente Pineda Gopar retornó a su lugar. Para aplacar los ánimos del diputado priista, el único diputado del MC y dueño del periódico “Noticias”, Ericel Gómez Nucamendi, se acercó a Pineda Gopar y le dio unas palmadas en la espalda.
Mientras en el recinto todo era morbo, afuera del salón de sesiones empleados de Pineda Gopar y Díaz Sánchez arremetían con toda impunidad con pintas en los cristales contra el coordinador de la bancada del PRD, Jesús López Rodríguez, además de Félix Antonio Serrano Toledo y Anselmo Ortiz García, el ex tesorero que nunca rindió cuentas.
“Auditoria y cárcel para Jesús, Félix y Anselmo”, se leía en las paredes y puertas de cristal del inmueble legislativo rayonado con pintura blanca.
Los dos militantes ultras del “bronx” priista, Pineda Gopar y Díaz Sánchez, habían advertido que accionarían contra los perredistas por presuntamente “malversaron” 200 millones de pesos del presupuesto del Congreso, en complicidad con el Tesorero, Mauro Alberto Sánchez, aunque nada digan del dispendio de su jefe político: Alejandro Avilés Álvarez.
Apaciguados los ánimos al interior del recinto, Díaz Sánchez se acercó a Pérez Morales y en aparente señal de paz le dio la mano. Minutos antes de culminar, Pérez Morales abandonó el complejo legislativo. El reto a golpes no paso a mayores.
“Lo que pasa es que el compañero Manuel (Pérez Morales) siempre ha insistido y ha sido un gruñón y Oaxaca no merece que para todo se éste poniendo pretexto. Nosotros no decimos nada que tiene a su hija trabajando en el Congreso, pero alguien tiene que hablar por Oaxaca y decir las cosas. Yo me dedico a trabajar y defender a mis representados y no es justo que vengan dos, tres a…”, argumentó Pineda Gopar en entrevista al término de la sesión.
Sin embargo, justificó su accionar violento contra el diputado del PSD: “Yo no mandé ningún mensaje; esa es una acusación falsa, yo no acostumbró a mandar mensajes. Yo lo digo de frente. Que lo muestre si él lo tiene. Yo no tengo por qué amenazarlo; él dice que yo le mandé menaje, pero no es cierto; eso me molestó”, insistía el ex presidente municipal de su natal Juquila, que creó allá los “policías comunitarios”.
Por su parte, Díaz Sánchez –quien minutos antes había dado la mano a Pérez Morales en señal de paz– soltó: “Manuel es un charlatán y chantajista. Manuel también es un cabrón bandido que lo que puede llevarse se lo lleva” (sic).
“Hay que decir las cosas no es posible que se ponga ridículo por un día que se retrase el inicio del periodo”, reforzó Pineda Gopar y culminó la entrevista con los representantes del “bronx” tricolor.