“Si doy nombres de los políticos, me va a ir muy mal” ha dicho Ye Gon
Pues nada, que después de nueve años de alegatos, de defensas y acusaciones, al final se anunció que el empresario farmacéutico chino-mexicano Zhenli Ye Gon será enviado a México para ser procesado aquí, luego de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazara su segunda apelación para seguir su juicio desde la cárcel en Richmond, en Virginia, EUA.
Así que Ye Gon será confinado y continuará su proceso México y bajo las leyes mexicanas.
Uno de los argumentos que utilizó su defensa en EUA fue de que si se le enviara a México ‘sería carne de tortura o incluso sería asesinado por ‘soplón’. Ya se verá si ocurre. Aunque esto tiene una razón de origen:
Zhenli Ye Gon nació en Shanghai hace 53 años y se nacionalizó mexicano en 2002. Llegó a México muy joven. Vino para ganarse la mano de la chino-mexicana Tomoiyi Marx Yu. Los padres de ella habían arreglado el compromiso desde China. Al conocerla se enamoró de ella, tuvo hijos y formó una familia; pero también se hundió en un mundo sórdido y alucinante.
En 1997 obtuvo la nacionalidad mexicana, durante el gobierno de Vicente Fox Quezada, gracias a la intervención de unos laboratorios químicos privados, argumentando que era laboratorista ahí.
Como empresario, comenzó comprando y vendiendo productos chinos que eran decomisados en la aduana de México. Luego puso su empresa orientada a lo farmacéutico. Así creo Unimed en 1999 a través de la cual importaba seudofedrina, una especie de antigripal que también se usa para hacer metanfetamina y esto -se presume- lo conecto con el cártel de Sinaloa que era dirigido por Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán y cuyo principal mercado son, precisamente los Estados Unidos.
A la vista de las autoridades Zhenli Ye Gon comenzó a importar más seudofedrina de lo permitido, así que comenzaron a investigar las razones y a cuidar las operaciones que llevaba a cabo hasta que en 2007 se hizo un operativo –la Operación Dragón– en su casa en el exclusivo barrio Lomas de Chapultepec, en la ciudad de México en donde, para sorpresa de todos, se encontraron ni más ni menos que 205 millones de dólares en efectivo.
La imagen de las pilas de dinero en su casa dio la vuelta al mundo. Esos 205 millones de dólares evidenciaban el nivel de operaciones que llevaba a cabo el chino-mexicano y el nivel de manejo de dinero ¿de quiénes? para operaciones extra legales.
En todo caso aquello fue un escándalo monumental. Cuando fue detenido en Estados Unidos Zhenli Ye Gon en 2007 dijo que el dinero que se encontró en su casa era de un político mexicano vinculado con el Partido Acción Nacional. Se presume que se refería a Javier Lozano Alarcón, quien por entonces era secretario del Trabajo durante el gobierno del entonces presidente, Felipe Calderón Hinojosa.
Según dijo Ye Gon en entrevista, “Lozano Alarcón le habría exigido que le escondiera el dinero. Al intentar negarse a hacerlo –dijo Ye Gon–, Lozano le habría dicho -con su acento oriental- “… o coopelas, o cuello…”. Que es decir, ‘O cooperas o cuello; o cooperas o mueres’. Grave acusación. En México impactó su frase, pero se le menospreció y pasó a lo chusco.
Queda clara una cosa: nadie tiene una respuesta sobre el origen del dinero. ‘En Estados Unidos la Fiscalía se desistió de seguir adelante con una acusación por narcotráfico contra Ye Gon al quedar demostrado –se dijo- que los fiscales habían ocultado a la defensa que uno de los testigos clave en contra del empresario se había retractado en México.’
En septiembre de 2015, el periódico digital Sin embargo, reprodujo una entrevista que le hizo a Zhenli Ye Gon la cadena Univisión.
‘Parte de esa fortuna está ligada –dijo Ye Gon a Univisión-, a políticos mexicanos, a los que no quiso mencionar pero que parece tener muy presentes’: “Yo llevo un uniforme de preso –dijo- Si yo denuncio los nombres de los políticos uno por uno, para mí no es bueno porque yo enfrento una extradición y si regreso me van hacer pasar muy mal”.
[El dinero guardado, sigue diciendo Ye Gon] “Era para campaña política, me dijeron que 20 dólares por un voto, 50 dólares por otro…” y agregó: ‘el operador me dijo que en último caso el dinero sería usado para provocar la caída del gobierno del candidato opositor si triunfaba en las elecciones presidenciales [Andrés Manuel López Obrador era el candidato opositor]…
Zhenli Ye Gon ha involucrado a políticos y operarios de políticos de México en un mundo ajeno a la función pública, aunque impacta en ésta. Ha hecho acusaciones muy delicadas en su defensa; ya las tiene que probar y la autoridad mexicana deberá asegurar si esto es cierto, y cumplir con la ley.
“Si doy nombres de los políticos, me va a ir muy mal” ha dicho Ye Gon. En todo caso muy probablemente el chino-mexicano ya haya declarado ante la autoridad de Estados Unidos todo lo que sabe, lo que hace que los sistemas de seguridad de aquel país tengan en la mira a quienes pudieran estar involucrados en este tema.
Si no son verdad sus acusaciones, tendrá que vérselas con demandas de difamación y más.
Pero si son ciertas, muy seguramente algunos políticos mexicanos ya están temblando ante la posibilidad de que se conozcan sus nombres, esto aumentará aún más la desconfianza en la política y en los políticos, en momentos de crisis de credibilidad como son los que ya vivimos. Quién lo diría, Zhenli Ye Gon ya en México los tendrá en sus manos.
Tomado de La Silla Rota: http://lasillarota.com/o-coopelas-o-cuello/Joel-Hernndez-Santiago