LIBROS DE AYER Y HOY

De la cinco candidatas a la presidencia de la república que ha habido en México, la que tenía una visión mas amplia de lo que deben ser los derechos humanos, era Rosario Ibarra de Piedra.

Fue dos veces  candidata, en 1982 y en 1988. En esta última, lúcida, comprometida, progresista, se enfrentó al sistema junto con Manuel Cloutier, para denunciar el gran fraude que le hizo Miguel de la Madrid a Cuauhtémoc Cárdenas, para darle la presidencia a Carlos Salinas de Gortari.

Personaje extraordinario  es exhibida de cuerpo completo en los videos de Diaz Sánchez Los encontraremos ( ganador del Ariel) y Ochenta Rosarios para Jesús, por sus ochenta años, en recuerdo del hijo desaparecido por el sistema priísta.

Los medios enzarzados en el chisme político cotidiano, pasan de largo a esta mujer, pese a que  dio realce como la primera que rompió el tabú de las candidaturas femeninas y a la que le siguieron cuatro más, con altas y bajas.

La más brillante de todas  ha sido la sonorense Cecilia Soto, mujer de cambios partidarios constantes, que terminó siendo funcionaria  de Vicente Fox.

Compitió en 1994 contra Zedillo después de la tragedia de Luis Donaldo Colosio y obtuvo el 2.75 por ciento de la votación. Así como una misma mujer ha competido dos veces en dos elecciones, en una elección, la misma del 1994, participaron dos mujeres.

La otra fue  Marcela Lombardo, hija del legendario Vicente Lombardo Toledano y lo hizo por el PPS, partido que él creó.

Marcela, mujer bien intencionada y muy cercana al partido oficial, reflejó no obstante su poco carisma, con un punto 39 por ciento de la votación.

Otra sonorense la siguió, Patricia Mercado, ahora parte del personal  de Miguel Mancera, lanzada en 2006 por un  transitorio organismo el Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina que le dio  la misma votación que a Soto, el 2.75 por ciento.

La última ha sido Josefina Vázquez Mota, candidata del PAN, ahora sometida a cuestionamiento por presunta corrupción, quien se enfrentó a  López Obrador y a Peña Nieto en 2012 y quedó en tercer lugar.

Las elecciones de 2018, dejan al aire si habrá una o dos candidatas mujeres. La candidatura de la mujer indígena mencionada por el EZLN, no está a discusión.

Pero si lo está la de la señora Márgara Zavala porque hay otros precandidatos de su partido que aspiran a la misma nominación.

Aspirantes que como en el caso de Ricardo Anaya, presidente de ese partido, están siendo sometidos a una campaña permanente y  muy bien pagada -lo que crea sospechas-, para que definan su posición.

Llaman la atención esas encuestas extrañas que le dan a la señora la más alta votación, sin especificar fórmulas, medios y en muchos casos entornos.

Y lo que es peor,  sin mencionar las méritos que puede tener una mujer que disfrutó sin mandato legal,  de las ventajas de seis años en Los Pinos.

En el futuro inmediato será interesante escuchar a la mujer indígena con voz propia y no por medio de asesores blancos. Y comprobar que su propuesta no se contrapone por motivos de inquina, con otros que también están en una tesitura democrática.

Como pionera, doña Rosario abrió nuevos tiempos, pero estos pasaron de noche para muchos, uno de ellos el conocido escritor Carlos Fuentes que en su libro Nuevo tiempo mexicano (Aguilar Nuevo siglo 1995) al referirse en buena parte al año de 1994, menciona a los candidatos a la presidencia, pero olvida que en esa campaña hubo dos mujeres candidatas.

Fuentes le dedica “un diario” a ese año crucial, al que llama como en la película “el año que vivimos en peligro”, asombrado de los acontecimientos que signaron la vida de los mexicanos: el surgimiento del EZLN, los asesinatos de Colosio y Ruiz Massieu y la devaluación de diciembre.

Esta obra  es la continuación podría decirse, de Tiempo Mexicano publicado 20 años atrás  -por 1975-; éste se nutre de ensayos, en forma de artículos los que se refieren a 1994.

Es un libro que habla de la actualidad, pero se retrotrae a nuestra historia como una continuidad de la vida de un país que tiene memoria.

Lúcido y lleno de referencias, el gran escritor olvida no obstante, que en el país hay mujeres. Y que algunas aspiran a la presidencia como muchos hombres, sin tener méritos.

laislaquebrillaba@yahoo.com.mx