CIUDAD DE MÉXICO, marzo 16.- “El culto a Benito Juárez a lo largo de estos años, está intrínsecamente relacionado a la cultura de masas”, aseguró la historiadora Rebeca Villalobos, quien impartió la conferencia El culto al héroe. La construcción retórica y estética de Benito Juárez, 1872-1972, la tarde de este miércoles 15 de marzo en el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM).

A unos días de conmemorar el 211 aniversario del nacimiento del Benemérito de las Américas, el 21 de marzo de 1806, en el pueblo de Guelatao, Oaxaca, la investigadora explicó el proceso de conversión simbólico y mítico de este personaje histórico en héroe de culto nacional.

La académica de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM consideró que el sólo nombre de Juárez ha llegado a significar una serie de valores que hoy juzgamos incuestionables, dentro de nuestra cultura política.

“Los principios que han hecho a Juárez un símbolo es la legalidad, la independencia y la idea de soberanía. Juárez en vida fue muy cuestionado, después de su muerte también, aunque la historiografía contemporánea lo ve con ojos menos aguerridos, resulta interesante que pese a todo, sigue simbolizando la suma del poder, del orden, autoridad, gracias a la legalidad y principios morales”.

Mediante una serie de imágenes emblemáticas que circularon en la prensa, literatura y poesía y expresan el culto a Juárez, la investigadora abordó su legado y vínculo con la sociedad.

Para tratar de agrupar este cumulo de expresiones, habló de tres contextos distintos: el culto funerario (considerado el primer espacio en el que se le reivindica como un símbolo a partir de un espacio luctuoso afectivo, en donde los sentimientos cobran un papel fundamental), primera expresión del culto al héroe que se da entre 1872 y 1990.

Por otro lado, el culto civil, la reivindicación y veneración como un icono de alcance nacional, que se caracteriza por el consenso social de amplio alcance.

“Cuando uno le habla de Juárez a un niño de 10 años, la única imagen que podría venir a su mente en ese momento sería la del billete de 20 pesos. Ese proceso de estandarización de la imagen física de Juárez y sus atributos es una consecuencia del culto civil que empieza a emerger de manera muy franca a partir de 1891.

“Hay un dato muy concreto que me permitió establecer ese corte. Por primera vez el 21 de marzo de 1891 se empezó a recordar a Juárez en su fecha de natalicio y eso expresó un cambio muy significativo. Ya no era el lamento por la pérdida, sino la celebración de un legado”.

Destacó que a partir de la década los años cuarenta se reivindica una imagen no solo civil sino popular, en la que Juárez se vuelve emblema de lo mexicano y lo popular.

De acuerdo con la doctora Rebeca Villalobos, durante el periodo que comprende de 1910 a 1976, el epíteto de Juárez es el del primer mexicano por excelencia, el símbolo de la raza mexicana o la patria mexicana.

“La importancia de Juárez hacia 1910 no tenía que ver con su origen étnico o social, sino con el legado político. Se comienza a reivindicar otras cosas, se aprovechan elementos históricos y muchas imágenes preexistentes. El culto a Juárez a lo largo de estos años esta intrínsecamente relacionado a la cultura de masas. Sus aspectos más interesantes vienen de la reconfiguración que los muralistas hicieron de su imagen, con la reivindicación de un símbolo. Lo fundamental es ver las implicaciones retóricas de estas nuevas expresiones en torno a su imagen”.

Señaló que la figura del héroe ha planteado una serie de reflexiones para la historiografía académica, que desde hace mucho dejó de aspirar a ese discurso de elogio, para explicar más bien los fenómenos antes de juzgarlos.

“El héroe no es el individuo histórico. Con frecuencia el héroe se simboliza a través de una persona. La persona se convierte en un símbolo de muchas otras cosas, ese es el objeto de estudio con el que estamos lidiando. Los héroes son un conjunto de ideas, principios y expresiones muy tangibles que explican características fundamentales de nuestra cultura política. El culto a Juárez involucra todo esto”.