LIBROS DE AYER Y HOY
Algo diferente se vio en el primer debate de los candidatos a la gubernatura del Estado de México, una maestra sencilla que ofrece algo que multitud de expertos en el mundo, le han propuesto a México: la inseguridad debe enfrentarse con equidad, con cultura, con empleos, con deporte, pero sobre todo atacando la corrupción desde la honestidad.
Así lo propuso Delfina Gómez, la candidata de Morena, la noche del 25 de abril.
No cayó en la provocaciones apremiantes de una señora Mota un tanto enardecida y actualizando aquella clásica fábula esopiana, El que ofrece imposibles.
La panista repitió en varias ocasiones la oferta del millón de empleos, como en su momento lo hizo Calderón y nunca cumplió.
El debate de los candidatos a gobernadores en esa entidad tan demandada, aparte de las ofertas que han sido múltiples en las campañas y que las reiteraron a granel, solo dejó una evidencia: independientemente de cada uno, los que estuvieron presentes fueron los partidos.
El PRI con las promesas de siempre en boca del Alfredo del Mazo, el PAN, invocando al ladrón para parapetarse en la distracción, en palabras de Mota; Morena, con una sencilla maestra Delfina Gómez, que desafió con tranquilidad las embestidas agresivas de la panista.
Los otros tres candidatos, el PRD con Juan Zepeda, el PT con Óscar González y un partido independiente con Teresa Castell, cumpliendo un cometido de promoción personal y partidaria.
La señora Castell centró su discurso en atacar a los partidos, pero nunca explicó de donde viene su partido y si será subsidiado por empresarios de derecha como lo fue El Bronco en Nuevo León.
Quedó claro que esa entidad tan peleada por el PRI al grado de haber omitido todas las reservas del uso de recursos y violar la ley con la compra de credenciales para votar, es un paradigma de lo que ocurre en México.
Estado controlado por un grupo poderoso que está en el poder, tiene los índices más altos en feminicidios, secuestros y desapariciones y al actual gobernador Eruviel Ávila, se le acusa de estar participando activamente para dejar de nuevo al PRI en el poder.
Con recursos públicos desde luego. Dos casos llamaron la atención: el señalamiento que hizo del Mazo de los mil millones que le dio el gobierno federal a la señora Mota cuando el propio gobierno priísta ocultó disposiciones de dinero público y la advertencia que hizo el candidato del PT Óscar González, de que próximamente puede haber el primer ex presidente de México en la cárcel, igual que en otros países. Esopo, a quien se considera el creador de la fábula, nació en Amerium, un poblado de Asia menor en el siglo VI antes de la nuestra era.
Amante del diálogo y la metáfora, el creador se vale de símiles, por lo general de animales, para advertir o criticar la conducta humana.
En la colección Grandes de la literatura de Editores Mexicanos Unidos (2014) se publican alrededor de 140 fábulas que resuman ingenio, sabiduría y un toque filosófico realista.
Esopo, quien fue esclavo, se creó enemigos por la hondura como criticó la miseria humana. Uno de ellos lo asesinó tirándolo desde una roca.
Su fábula El que promete imposibles se refiere a un hombre que promete a los dioses cien bueyes si lo alivian de una grave enfermedad.
Al interrogarle su mujer si cumplirá su promesa, él responde que no cree que los dioses vayan a venir a reclamarle.
Cierra la fábula el genial Esopo, con una advertencia que deberían de tomar los que tanto prometieron en el debate: “Muchos son los que ofrecen con facilidad lo que saben que no podrán cumplir”
laislaquebrillaba@yahoo.com.mx