+ Las ciudades más afectadas son Matías Romero, Juchitán y Oaxaca de Juárez, según reportes preliminares
OAXACA, OAX., septiembre 8.- El sismo de 8.4 grados en la escala de Richter, con epicentro a 137 kilómetros al suroeste de Tonalá, Chiapas, ocurrido a las 23:49 de la noche de este jueves 7 de septiembre de 2017, dejó múltiples daños materiales, aún no cuantificados, especialmente en las ciudades de Oaxaca, Juchitán y Matías Romero, con varios heridos, pero ningún deceso hasta la madrugada de este viernes.
De acuerdo con las primeras informaciones de las autoridades correspondientes, personal de la Dirección de Protección Civil del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez reportó desprendimientos y fisuras en inmuebles del Centro Histórico, la caída de una barda en Ciudad Universitaria y los remates del campanario del templo católico de San Juan de Dios, así como el reporte de una fuga de gas en la Colonia Reforma y afectaciones a la tubería del hotel “Marqués del Valle”.
Más de 30 inmuebles, especialmente casas antiguas, hechas de adobe, abandonados por litigios familiares, habrían resultado afectadas en el primer cuadro de la capital, principalmente por desprendimiento de mampostería, caída de bardas y/o paredes, así como marquesinas.
Hospitales, clínicas y socorristas de la Cruz Roja y otros organismos de ayuda atendieron a medio centenar de personas por crisis nerviosa y heridas menores, originadas por la caída de objetos durante el movimiento telúrico.
Por su parte, el Gobierno del Estado, a través del Coordinador Estatal de Protección Civil (CEPCO), Armando Demetrio Bohórquez Reyes, informó de la activación de los protocolos de seguridad en la entidad y precisó que el movimiento telúrico se percibió con mayor intensidad en las regiones del Istmo de Tehuantepec, Costa, Sierra Sur y Valle Central.
En el Valle Central reportó de manera preliminar la caída de bardas y daños en algunos inmuebles, mientras que en Matías Romero, en la región del Istmo, el Hotel Anel Centro, sufrió una inclinación peligrosa, por lo cual se realizó la evacuación correspondiente.
Lo que aún no había informado CEPCO, pero que ya se difundía por parte de la población afectada a través de las redes sociales, es la caída de parte del palacio municipal de Juchitán de Zaragoza, así como bardas, negociaciones como la “Abarrotera del Sur”, y varias casas dañadas en su estructura.
De acuerdo con reportes de los cibernautas, tanto en Matías Romero como en Juchitán habría varios heridos, desde leves hasta graves, pero las cifras no se precisaron.
Mientras tanto, desde la zona costera de la entidad, como en Salina Cruz, Huatulco, Puerto Escondido y Pinotepa, reportaban la posibilidad de un tsunami, ya que las aguas del mar se retiraban hacia las profundidades, lo que hacía prever peligro de inundaciones.
CEPCO sólo alertaba sobre la posibilidad de olas de hasta más de cuatro metros de altura, por lo que exhortaba a la población a alejarse de la zona costera y estar preparados ante cualquier emergencia.
Igualmente, desde otras partes del estado se informó de deslaves en diferentes tramos de la red de carreteras, al igual que la caída de rocas y árboles.
La playa Zipolite en Puerto Escondido fue evacuada por alerta de tsunami, en tanto era controlad un incendio en la Refineria “Antonio Dovali Jaime” de Salina Cruz.
Además, se supo de daños estructurales en el Hospital de Nochixtlan, por lo que personal médico desaloja a las y los pacientes, mientras en la Ciudad de Oaxaca evacuaban el Hospital del ISSSTE por daños estructurales.
Desde el municipio conurbado de San Sebastian Tutla, muy cerca de la capital, se dieron a conocer daños estructurales en la Iglesia de la comunidad que ponen en riesgo toda la edificación, alertaron.
En un comunicado de prensa, el Gobierno del Estado puso a disposición de la ciudadanía las siguientes cuentas en redes sociales para reportar daños: @alejandromurat @GobOax y @VoceriaGobOax