+ El grupo “Cuauhpanco” retrata fragmentos biográficos del compositor oaxaqueño
CIUDAD DE MÉXICO, febrero 9.- Dios y Macedonio. De pie ante la adversidad es una obra de teatro que se sumerge en un viaje de 60 minutos entre recuerdos derivados de los últimos momentos de vida de Macedonio Alcalá, maestro, violinista, pianista y compositor mexicano, reconocido por su obra maestra Dios nunca muere, un vals del siglo XIX.
El grupo de teatro Cuauhpanco es ganador del estímulo de la Convocatoria para la producción de Teatro que lanzó la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca, durante 2017. Bajo la dirección de Wagive Jiménez Turcott, creó este proyecto basado en la investigación bibliográfica y musical sobre la vida del creador de este vals, que se ha convertido en el himno oaxaqueño.
“Es una obra cuyas escenas están centradas en la humildad y grandeza a la vez del maestro, en ese ser sencillo que lo hicieron tan grandioso, y que no es la parte romántica que se tiene en algunas de sus biografías”, describió Wagive.
Relató que el maestro murió de una enfermedad muy dolorosa, murió en la pobreza, sí con el reconocimiento de sus contemporáneos pero no en la opulencia y la gloria artística.
Le tocaron tres guerras de intervención, la francesa, la norteamericana y la guerra de Reforma, le tocaron pestes, terremotos “fue una época sumamente convulsiva de nuestro país y en medio de todo ese universo cambiante y sacudido por diversos acontecimientos compuso Dios nunca muere. Entonces es algo muy simbólico y significativo todo lo que hay alrededor de esta puesta en escena”.
Dios y Macedonio. De pie ante la adversidad, es un texto original de la dramaturga Wagive Jiménez, que hace un recorrido por la vida del maestro, sin una estructura aristotélica, “son recuerdos entrelazados a manera de caja china que abren la memoria de este personaje que a su vez nos enlaza con los recuerdos que tenemos del Oaxaca de antaño”, explicó la autora.
Este himno que, entre otras cosas, refleja el dolor de la vida, pero también la dignidad con la que humanamente se hace frente a las adversidades, recalcó Jiménez Turcott, fue la fuente de inspiración que surgió ante la observación del fenómeno que sucede en Oaxaca y en otras partes de México, que cuando se comienza a tocar este vals, los oaxaqueños se ponen de pie.
“A partir de este acto simbólico y representativo para nosotros, decidimos hacer una investigación que tiene que ver con nuestra identidad, con nuestro sentido de pertenencia, con el arraigo a nuestra cultura.
Identificamos en este personaje, después de conocer su biografía y trayectoria, cómo las personas que somos de esta tierra, aún ante las condiciones extremas, aún ante las circunstancias adversas, los oaxaqueños y oaxaqueñas nos ponemos de pie”.
La puesta en escena es un homenaje al maestro Macedonio Alcalá, y es un trabajo escénico en el que participan 30 músicos en escena, 23 actores y un equipo de 15 creativos colaboradores del proyecto desde la investigación hasta el montaje.
La música será interpretada en vivo por el área musical de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), quienes tocarán cuatro piezas: Rojo Iguala, escrita exprofeso para la obra, recreando el estilo musical del maestro; Pequeña danza y Vals; así como un fragmento de Solo Dios en los cielos, y por supuesto la pieza que le dio vida a esta obra teatral Dios nunca muere.
Dios y Macedonio… se estrenó el lunes 5 de febrero con teatro lleno. Las próximas presentaciones serán los lunes 12, 19 y 26 de febrero a las 20:00 horas en el Teatro Macedonio Alcalá.
Por otra parte, Wagive Jiménez reveló que el Archivo General de Oaxaca en colaboración con la Facultad de Bellas Artes realizarán también una presentación con perspectiva histórica el sábado 24 de febrero a las 19 horas en la Ciudad de los Archivos, con la exhibición de archivos históricos, partituras y el violín de Macedonio Alcalá, muestra que permanecerá abierta al público por un mes.
Adelantó que la obra comenzará una gira en otros espacios, tanto en la ciudad, como en el interior del estado de Oaxaca, y ya se encuentran en pláticas para que llegue al Centro Nacional de las Artes, en la Ciudad de México.