+ La Asociación de Periodistas de Oaxaca exige al gobierno estatal y a la Fiscalía General aplicar la ley para castigar a las y los infractores que están identificados
OAXACA, OAX., marzo 31.- El reportero Rufino Feria acudió a cubrir la información sobre el inicio de las actividades de los moto taxis en Pinotepa Nacional, cuando los taxistas lo agredieron verbalmente, y después mandaron a una robusta mujer a golpearlo, robarle sus pertenencias y desnudarlo. El compañero, está claro, no levantó la mano para defenderse de la agresión de la mujer, como esperaban quienes la enviaron.
La agresión se dio en el marco de la disputa entre taxistas y moto taxistas, donde los primeros impiden que los segundos inicien a dar servicio a la población. Un conflicto que las autoridades estatales en la materia han dejado crecer y cada vez con más violencia. La que hoy se ejerció sobre nuestro compañero, miembro de la APO, Rufino Alejandro Feria Bautista.
Los hechos están a la vista, nombres y filiación de los agresores, no debe tardar la Fiscalía General del Estado de Oaxaca no sólo en resolver el caso sino en castigar a los y la infractora. El trabajo de los periodistas, fundamental en una sociedad en busca de civilización, debe no sólo ser respetado sino protegido por quienes tienen ese encargo social.
Las denuncias y pruebas contra Gumaro Baños Clavel y Ciria Lidia Juárez Castañeda o Ciria Lidia Juárez Torres, aportadas por el periodista son contundentes, están en fotografías y videos, sólo una negligencia o complicidad abierta de la Fiscalía, a cargo de Rubén Vasconcelos, dará a éstos la impunidad que esa dependencia ha dado a todos los casos de periodistas agredidos.
El compañero denuncia que la agresión en su contra persiste, que cuando acudió al médico y después a declarar ante el MP los taxistas lo siguieron amenazantes y hostilizándolo. El encono en su contra es porque ha informado sobre ese conflicto entre los taxistas y los moto taxistas. Donde los primeros pugnan por impedir cualquier competencia.
Pedimos que se proporcione al compañero auxilio y vigilancia policial pues en evidente que su seguridad está en peligro. A la institución de Derechos Humanos declarar medidas cautelares.
La Asociación de Periodistas de Oaxaca A.C. (APO) condena este acto de barbarie y exige a la Fiscalía y al gobierno de Oaxaca cese su consentimiento de impunidad a los ataques contra los periodistas, sobre todo contra quienes son agredidos en el ejercicio de su trabajo.