Utopía
La primera víctima por la detención Luis Cárdenas Palomino, el “policía número uno de México”, de acuerdo al reconocimiento que le entregó el entonces titular del Ejecutivo federal Felipe Calderón –“espurio” si se quiere, pero mandatario al fin–, acompañado por el hoy prisionero Genaro García Luna, es el vicepresidente de Noticieros de Televisa, Leopoldo Gómez, después de ocupar el cargo desde febrero de 2000, todavía con Ernesto Zedillo en Los Pinos y a nueve meses apenas de que Vicente Fox encabezara el “cambio” con su adorada y muy corrupta “martita” como vicepresidenta y con frecuencia sin el “vice”. Los cambios sexenales, pues, anticipados por el consorcio de 13 de los dueños de México.
Salga o no de manera completa y definitiva el excelente moderador de Tercer Grado –legrado, para otros–, el cambio es de primer orden en el corporativo mediático todavía más importante del mundo de habla hispana. Lo es porque podría afectar la línea informativa y editorial de una empresa todavía con serios problemas de credibilidad –lo que explica también el ajuste– y de anunciantes.
La carambola hasta ahora es a tres bandas.
- Detención del “súper policía” que aprehendió a la ciudadana francesa Florance Cassez e Israel Vallarta –presuntos secuestradores de la banda de Los Zodiacos– y torturados por el primero, lo cual se observa en el video montaje transmitido por Televisa con la autorización del vicepresidente.
- La renuncia de Leopoldo Gómez González.
- Carlos Loret de Mola da a conocer en Latinus –patrocinado económicamente por Roberto Madrazo y el aún pésimo gobernador de Michoacán Silvano Aureoles Conejo–, un segundo video producido hace siete años en el cual Martín López Obrador recibe 150 mil pesos en efectivo de manos de David León, operador político entonces del impresentable Manuel Velasco, gobernador de Chiapas. El primer video implicó a Pio López Obrador y al mismo David entregándole dinero en efectivo.
La pregunta elemental es por qué esperaron siete años para dar a conocer el video con Martín y justo cuando la detención de Luis Cárdenas fue un hecho y puso muy nerviosos a Calderón Hinojosa quien se mantiene en silencio y a Loret de Mola demasiado inquieto. Mas lo verdaderamente importante es que Velasco Coello es especialista en chantajes políticos, venta y compra de apoyos por medio del partido que es un negocio familiar, tampoco es verde y menos ecologista.
A Loret de Mola Álvarez se le percibe demasiado nervioso porque la esposa de Israel Vallarta, preso desde hace 15 años sin mediar sentencia, lo exhibió como un vulgar delator. Dice Mary Sainz que en un careo efectuado el 27 de octubre del año pasado, que se hizo “en lo obscurito”, Loret de Mola señaló al vicepresidente de Noticieros de Televisa, Leopoldo Gómez, y a su entonces productora, Azucena Pimental, “como los responsables del montaje”.
Responsabilidad que si bien puede ser cierta no exime al AMLO-fóbico periodista y colaborador muy estrecho de Claudio X. González Guajardo, el plutócrata y evasor fiscal que dirige en los hechos la coalición Va por México, de su papel de conductor del noticiario Despierta, de Canal 2 (Las Estrellas).
“Que sepa de una vez el presidente que no me va a callar”, advierte con valentía sin precedente Carlos Loret de Mola Álvarez, victimizándose hasta el extremo el hijo de Rafael Loret de Mola, quien apenas el año pasado juraba que Televisa despidió a su vástago a cambio de mil millones de pesos de publicidad pagada. ¿Podrían ponerse de acuerdo padre e hijo?
Eduardo Ibarra Aguirre
Autor de Utopía. Coordinador del Grupo María Cristina. Perseguido por la Sedena (1993-2002) por difundir la propuesta del ombudsman militar. Demandante laboral del CEN del PRI (1992-93). Editor de Forum en Línea desde diciembre de 1993. Redactor de cinco libros y coautor de ocho. Corresponsal en Moscú (1977-79) y becario en Berlín (1967-68).
Colaborador desde el 12 de abril de 2021.