Libros de ayer y hoy
México celebra el día de las progenitoras a partir de una fecha creada en Estados Unidos en 1914, por el presidente Woodrow Wilson, fecha de la que se han deslindado varios países que fijaron su propio día y mes. Los días de celebración en los que entra el núcleo familiar, no solo tienen la dimensión económica de la festividad, sino el tramo religioso en el que entran las iglesias.
La ONU decidió integrar a la madre junto con el padre, el primero de junio, tras una asamblea de septiembre de 2012 que tomó esa decisión. No obstante, integra a la madre en otro día el 15 de mayo en el Día Internacional de las Familias.
Los días de celebración en los que entra el núcleo familiar, no solo tienen la dimensión económica de la festividad, sino el tramo religioso en el que entran las iglesias. Y ahí es donde se genera la polémica.
El machismo predomina frente a la madre en la familia tradicional
México ha sido parco en fijar fechas para días que suelen tener gran celebración. Por eso no causó impacto el que Vicente Fox creara el Día Nacional de la Familia el primero de marzo, con un toque moralista y religioso, que pretendía tal vez enfrentar el carácter abierto y universal que planteó la ONU el 15 de mayo.
En ese entonces ya se dirimía el problema de las familias disfuncionales, calificadas así no solo por la lógica disfunción de su entorno convencional (en esa época del 2009 con Felipe Calderón se acumulaban más de 85 mil divorcios), sino en la creación de nuevas familias, las de los matrimonios del mismo sexo, por ejemplo.
Estas que han sido signadas legalmente tuvieron y tienen el rechazo tajante de la iglesia católica y desde luego de los gobiernos panistas que duraron doce años. Este tipo de familia se ha desarrollado en México con normalidad y respeto y muchos de ellos son padres de familia.
Cosa como un contrasentido que no puede decirse de la familia creada por tradición, que enfrenta serios problemas en 4 de cada diez familias, según datos oficiales, que tienen que ver con problemas económicos, violencia intrafamiliar, alcoholismo, etcétera. Muchos de los feminicidios y violaciones se generan en el seno familiar, dominado en buena parte por el machismo.
Camilo José Cela. Ante la lucha por la familia aparece la literatura
La literatura exhibe un rostro sobre la familia que se da en los países, pero que por fortuna no es común. Quizá con esa obra ganó el Nobel el español Camilo José Cela: La familia de Pascual Duarte (Editorial Aldecoa primera edición 1942), una novela que impactó el entorno familiar hispano por los efectos que causa el vínculo familiar en algunos de sus miembros.
Es el ejemplo clásico de la familia disfuncional con un protagonista violento, que vive en un entorno miserable, con una madre enferma, una hermana prostituta y un hermano deforme. En Camilo se ve el impacto de la España de aquella época. Con un franquismo autoritario que acababa de instalarse. Pascual va ingresando a la cárcel de delito en delito, hasta que termina matando a su madre.
Una novela desoladora, terrible. Todo referido en un documento que alguien da a conocer. La definición convencional de lo que debe de ser la familia, se estrella a veces con la realidad.