Libros de ayer y hoy
Ahora resulta que algunos ministros renunciados, entre ellos Manuel Bárcena Villanueva, alegan que su conocimiento “no es compatible” con la voluntad popular. Con esto último desde luego que se refiere al trabajo del legislativo integrado por legisladores que han sido electos por el pueblo. Se les olvida en primer lugar que de esa voluntad popular viven, porque las leyes que crea el legislativo son las que interpretan.
Y absurdo que hablen de esa voluntad popular actual, cuando esta tiene siglos de estar presente e integra con el judicial y el ejecutivo, la triada de poderes que forman el estado mexicano. Como que son un poco torpes esos señores y lo que les falta precisamente es un poco de pueblo para funcionar mejor.
El PJ no destaca por su conocer, sino por su presunto equilibrio
Todo conocimiento busca en lo académico llegar a lo máximo. No solo los que incursionan en el derecho; todos y son muchos. Algunas disciplinas fundamentales son premiadas por el Nobel porque aparte de su excelencia han creado valores que servirán a la humanidad. Ese es el destino final de un conocimiento, que sirva.
En el Poder Judicial puede haber muchos expertos, pero los hay también en las otras disciplinas. Y si el judicial interpreta la ley, otros aplican su propio conocimiento en otro sectores de la vida del país. Lo que distingue a ese poder, no es propiamente su actividad, sino la intención del creador de las tres podres en Del espíritu de las leyes, (Alianza Editorial 2015) el Barón de Montesquieu, de que el judicial en una separación, fuera equilibrio de poderes. Acuérdese que el nuestro es un estado dispar.
La insistencia de que se aplica justicia es muy relativo. Algunos casos podrán ser resueltos de acuerdo a derecho, lo cual es normal y para eso les pagan, pero hay innumerables casos que jamás son resueltos o son resueltos mal. La justicia según se ha visto en los últimos tiempos del actual Poder Judicial, por lo general ha brillado por su ausencia. Se resuelven casos de trámite o aquellos que interesan a su punto de vista, como ha sido el de la avalancha de amparos que se resolvieron con rapidez.
Un conocimiento macheteado para presumir, no sirve
Ningún mexicano se puede desprender del pueblo así se vaya lejos. Despreciarán al país, lo vulnerarán, pero no podrán olvidar que nacieron en esta tierra. Es por eso que el conocimiento que ha impulsado el pueblo, aunque se busque fuera, parte de estímulos dados en el país. Y una parte de los ministros pretende desligarse del conocimiento especializado como voluntad popular y presumen que el suyo se puso a prueba en concurso de oposición.
Pero esa misma prueba y ese concurso lo creo el pueblo en diversas expresiones. Muchos de los jueces y ministros algunos ya renunciados, han egresado de la UNAM, casa de estudios que el pueblo creo y se mantiene con presupuesto oficial. Y con ese dinero que es del pueblo, se estimula el conocimiento de una parte del judicial en donde aprenden los juzgadores. La voluntad popular a la que desprecian, siempre ha estado presente en ellos, desde su nacimiento.
Teresa de Jesús Gil Gálvez
Nací en La Colorada, Sonora, estudié en la Universidad de Sonora que me dio mención honorífica por mi tesis La libertad de prensa en México. En la UNAM hice estudios de maestría en Ciencias penales. En medios sonorenses trabajé, desde la adolescencia, en los más importantes del estado y en julio de 1972 salí en un tren hacia la gran capital, donde he trabajado en medios importantes, diarios, semanarios y revistas, con breves retiros al mundo entre ellos una corresponsalía en España.
Colaboradora desde enero de 2017.
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