+ El actor nayarita Joaquín Cosío compartió sus experiencias con pobladores istmeños, quienes disfrutaron de la proyección de la película “El Infierno”
SANTO DOMINGO TEHUANTEPEC, Oaxaca, marzo 17.- Sencillo, carismático, el actor nayarita Joaquín Cosío, mejor conocido como “El Cochiloco”, el de la película “El Infierno”, sostuvo la tarde-noche de este jueves una amena plática con pobladores de este municipio de la región del Istmo, como parte del programa “Cine al aire libre”, impulsado por la actriz tehuana Amorita Rasgado.
El reconocido histrión fue recibido con beneplácito por aproximadamente 300 tehuanos, porteños y visitantes de otras localidades, reunidos en el edificio de la Fundación Tehuantepec “Dr. Raúl Ortiz Urquidi –ubicado en la Avenida Juana C. Romero, junto al parque del Barrio de San Sebastián–, que alberga actualmente a la Dirección de Cultura del Ayuntamiento.
El encuentro estaba previsto para las seis de la tarde, pero empezó con casi una hora de retraso. Al llegar Cosío una tehuana le colgó un collar de guiechachis en el cuello y lo acompañó hasta la mesa de honor, donde ya lo esperaba Amorita Rasgado.
Minutos después hizo su entrada triunfal la presidenta municipal, Yesenia Nolasco Ramírez, acompañada de su esposo y sus hijas. “¡Bienvenido Joaquín ‘Cosio’!”, le expresó la alcaldesa en nombre del pueblo tehuano, y refirió parte de la trayectoria del artista.
“Emocionado y contento”, el actor agradeció la invitación y dio inicio a la sesión de preguntas y respuestas en la que se vio a un público entusiasta por conocer de viva voz sus experiencias.
“Empecé haciendo teatro, que es difícil, complicado, poca gente lo va a ver; sin embargo, es la verdadera formación del actor: hay que lograr que el espectador sienta la emoción que estoy interpretando. Hacer teatro para mí es lo mejor, es lo que más me gusta. Pero no paga, ensayas tres meses, representas dos meses, es difícil que la gente vaya masivamente, tiene todo en contra, pero justamente por eso hay que hacer teatro”, afirmó Cosío.
Cuestionado sobre la experiencia de interpretar a “El Cochiloco”, expresó: “Soy el primer sorprendido del éxito de ese personaje. Lo hice como hago todos: intentado hacerlo de la mejor manera posible, pero nunca pensé que pudiera tener estos alcances. Cambió mi vida radicalmente, porque la manera como la gente quiere a este personaje es asombrosa: llegan personas y me abrazan, y me dicen ‘¿Qué pasó mi Cochi? Tómate una cerveza; dime como dices en la película: quiubo cabrón’.
“Me ha pasado de todo con ese personaje. Y lo más valioso es el cariño que la gente le tiene, y he tenido que aprender a vivir con eso. Porque la gente quiere tomarse una fotografía conmigo, y eso ha modificado mi vida. Mi vida personal, mi vida pública está alterada por ese personaje y otros tantos, pero ‘El Cochiloco’ ha sido determinante, y no me queda más que agradecer ese cariño que tienen”, dijo.
Sobre la situación del cine mexicano comentó que “películas hay un montón, que tengan éxito es lo complicado. He hecho películas con personajes tan valiosos como el ‘Gordo Mata’ (El Cochiloco). He hecho otras con personajes preciosos como el de Matando Cabos, el de Backyard (El Traspatio), La Sangre Iluminada, El Mar Muerto. Pero la industria es tan complicada, tan cara, tan compleja, que a esos personajes nadie los vio, y están ahí, de alguna manera, en el olvido, esperando algo.
“En ese caso el actor no tiene demasiados elementos para hacer lo que quisiera. Siempre nos invitan a la fiesta, y nos tenemos que portar bien; en el mejor de los casos intentar hacer lo mejor que se puedan hacer las cosas, sin traicionar nuestras ambiciones artísticas, porque la carrera es difícil, complicada. Pero como actores estamos en espera de personajes, y el personaje más difícil es el que sigue”, compartió.