Utopía
Después de calificar el presidente Andrés Manuel el trabajo de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), como una acción injerencista, reprobable y violatoria a la Constitución, con características propias de actos golpistas, al entregar “alrededor de 50 millones de pesos” a Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad –que padrotea Claudio X González Guajardo con un sueldo de 300 000 mil pesos mensuales y administra María Amparo Casar, solicitó a la Casa Blanca “suspender el apoyo financiero”, porque va en contra de las relaciones de respeto mutuo y no intervención propios de la relación entre ambos gobiernos.
Los elementos que sustentan los adjetivos para describir el financiamiento de la USAID a MCCI, dados a conocer por la revista Contralínea con documentos y facturas de los archivos de la asociación civil, son que se trata de una “una banda, una organización delictiva de cuello blanco, una reacción conservadora que ahora articuló a todos los opositores… y los medios de información, para arrebatar la mayoría en el Congreso”, para que el gobierno de la Cuarta Transformación “no pueda usar el presupuesto en beneficio de los pobres”.
López Obrador leyó el texto completo de la nota diplomática en la mañanera del viernes 7 en un hecho sin precedente, salvo prueba en contrario, minutos antes de su primer encuentro virtual con la vicepresidenta Kamala Harris, y explicó de su ronco pecho: “Imagínense, dinero de la embajada de Estados Unidos para pagar la propaganda en contra nuestra”.
Más aún, apuntó sin matices: “Es injerencia, es intervencionismo y es promover el golpismo el cual no sólo significa uso de armas por parte del ejército, sino también los movimientos gestados con apoyo de gobiernos extranjeros y medios de comunicación, como lo que ocurrió en Chile en 1973 o al presidente (Francisco) Madero en 1913. Por tanto, sentenció AMLO, es una práctica equivocada de Washington –que antes infiltrara agentes en los países, comentó– y ahora subsidie a opositores a gobiernos legítimamente constituidos. Sin embargo, descartó que el episodio afecte la relación bilateral.
Esos recursos, apuntó como hipótesis, pudieron haber ido a comentaristas o hacia abogados que elaboran amparos contra el gobierno de la 4T, como sucedió y sucede en las obras del sexenio: aeropuerto Felipe Ángeles, Tren Maya y Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
La USAID es la institución estadunidense encargada de distribuir la mayor parte de la “ayuda” exterior “de carácter no militar”, y fue fundada en noviembre de 1961 por el presidente John F. Kennedy, pero los gobernantes la presentan como “organismo independiente”, pese a lo cual fue expulsada –por intervencionista– de Rusia en octubre de 2012 y de Bolivia en mayo de 2013.
Acaso por esa claridad empleada en Palacio Nacional, AMLO fue enfático en su intercambio con Harris al subrayar que la migración del triángulo del norte centroamericano también es del interés mexicano, por las relaciones políticas, históricas, de amistad “y a veces de diferencias con Estados Unidos”. Pero compartimos una frontera que nos une de más de 3 mil kilómetros, “y tenemos que buscar el entendimiento, no pelearnos”.
Buena lección en defensa de la soberanía nacional y simultáneamente por la cooperación entre Estados Unidos y México, es la que brinda el tabasqueño de Macuspana (Tepetitán), mientras los intelectuales orgánicos formados y aun colonizados por el imperio y sus aliados persisten en la obsesión de subestimar al presidente hasta caricaturizarlo. Allá ellos y sus realidades diseñadas a modo.
Eduardo Ibarra Aguirre
Autor de Utopía. Coordinador del Grupo María Cristina. Perseguido por la Sedena (1993-2002) por difundir la propuesta del ombudsman militar. Demandante laboral del CEN del PRI (1992-93). Editor de Forum en Línea desde diciembre de 1993. Redactor de cinco libros y coautor de ocho. Corresponsal en Moscú (1977-79) y becario en Berlín (1967-68).
Colaborador desde el 12 de abril de 2021.