OAXACA, OAX., enero 23.−Aunque mantienen ciertas discrepancias, productores y promotores de mezcal se pronuncian por acuerdos y una mesa de diálogo con el Congreso de la Unión y el gobierno e instituciones estatales a fin de ir por un solo camino en la solución del saqueo de maguey y el problema general de la bebida.

Ello porque el mezcal [tradicional, sobre todo] no sólo está de moda o vive un boom o un reconocimiento, sino que, principalmente, como coinciden investigadores universitarios y productores de maguey y la bebida, se encuentra en vísperas de una severa crisis, provocada en buena parte por la arremetida de las “grandes transnacionales voraces”.

Así se manifestó en el reciente encuentro de productores de la planta, mezcaleros, promotores de la bebida y propietarios de mezcalerías −quienes platicaron por separado con E-Oaxaca− titulado “Sin maguey no hay mezcal”, efectuado en el jardín “El Pañuelito”, convocado a próposito del ilegal saqueo de agave que actualmente sufre el Estado por parte de la gran industria del tequila.

No hay diálogo con el gobierno

“Si hubiera diálogo con el gobierno del Estado” no habríamos organizado el encuentro “Sin Maguey no hay Mezcal”, asienta Pedro García Vásquez, productor de la bebida de San Baltasar Chichicápam, Ocotlán de Morelos, Oaxaca.

El gobierno “ha organizado reuniones con los industriales” del mezcal, pero “no con los productores”, sostiene.

−En tanto, los tequileros están yendo hasta los pueblos más recónditos de Oaxaca, ¿así es?

−Así es.

−¿Y qué están haciendo exactamente?

−Están saqueando todo el maguey que tenemos. No olvidemos las crisis de 1996 y 2007, porque hoy están generando otra. Qué es lo que hacen: comprar la mayor parte de nuestro maguey para después poder traernos hijuelos que no producen al 100 por ciento. Ellos tienen el negocio redondo.

“Y cuál es la intención hoy al realizar esta protesta: que el gobierno intervenga y se cumpla la normatividad. Los tequileros se llevan maguey de entre dos y siete años, de tal manera que a las plantas no les permiten alcanzar ni la madurez ni los kilos necesarios.

“¿Qué ocasiona esto al oaxaqueño: que no tenga para producir mezcal. Y vuelva la crisis, puesto que es muy baja la producción de maguey, lo cual causa que venga un alza en su precio y nosotros no tengamos los suficientes recursos para poder comprarlo”.

−Se supone que los tequileros nada más pueden producir su bebida con el llamado maguey azul, pero al parecer están agarrando parejo.

−Están agarrando parejo porque, de una u otra forma, su normatividad les permite utilizar los azúcares que tiene el maguey, carecen de un reglamento estricto que provoque que, en un momento dado, se revise a fondo cómo trabajan.

−Se sabe que la industria tequilera es transnacional, ¿qué está pasando en realidad?

−Necesitamos la intervención urgente de la Cámara de Diputados federal, del Congreso de la Unión y del gobierno del Estado para que se vayan regulando y reglamentando esos temas.

“Ya de antemano se presentaron al Congreso del Estado propuestas para el tema de acuerdos con el fin de que se empiece a tomar medidas al respecto”.

−¿Hay diálogo con el gobierno de Gabino Cué?

−Si hubiera diálogo no estaríamos aquí. No hay diálogo. No ha hecho una reunión de productores. Sólo ha realizado reuniones con los industriales.

“Lo primero que se habría de realizar es una mesa de diálogo con todos. Para empezar, esa es la parte fundamental, tenemos que llegar a acuerdos: Congreso de la Unión, gobierno e instituciones estatales y federales correspondientes para ir sobre un solo camino en el asunto del mezcal”.

Sí hay diálogo con el gobierno

Para Abel Alcántara Hidalgo, guanajuatense que impulsó la asociación civil Maestros del Mezcal, en cambio, no sólo hay diálogo con el gobierno del Estado sino que incluso gracias a un “billete” de éste han habido resultados en relación con la situación de la bebida.

−¿Qué pasó con la reunión que tenía programada la asociación civil Maestros del Mezcal con el gobernador Gabino Cué?

−Está pospuesta para una nueva fecha. Por lo pronto, estamos esperando que entregue el cemento para los pisos firmes de los palenques.

−¿Está entablado el diálogo?

−Sí, claro. Pienso que con el gobernador [Gabino Cué] se ha empezado a establecer una nueva política de apoyo. Alrededor de hace tres años, inicié la organización de los maestros mezcaleros con la ayuda de un programa de coinversión de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso).

“Me dieron 230 mil pesos, nosotros pusimos otro tanto y el resultado está a la vista: formamos cooperativas en cada una de las regiones, dos sociedades de producción rural, una sociedad de solidaridad social, registramos la marca “Maestros del Mezcal”, nos regalaron una botella, el artista plástico Sergio Hernández puso las etiquetas. Y esto se hizo con apoyo, con un billete del gobierno del Estado.

−Ante el saqueo del maguey de Oaxaca, ¿cuáles serían la medidas inmediatas para tomar?

−Que los productores oaxaqueños se organicen mejor, que resiembren, que generen viveros en cada región, que realicen un programa de propagación de maguey −sobre todo de rescate de los agaves silvestres− y luego, que el gobierno y los maestros mezcaleros se sienten a dialogar a fin de que puedan determinar una forma de regulación de la compra de maguey por parte de algunos industriales de tequila en Oaxaca.

No es momento de dividirnos

Para Félix Hernández Monterroza, propietario de la mezcalería Cuish, ante el saqueo de maguey, las medidas inmediatas que deberían tomarse son: la realización de encuentros como “Sin maguey no hay mezcal”, es decir, la vía cultural del acercamiento con los consumidores, los medios de comunicación y los funcionarios correspondientes.

Después, la idea es que se pueda tener “un acercamiento más concreto con las autoridades a fin de señalarles la necesidad de que se realice una normatividad para regular la compra de maguey”.

−¿No hay ya demasiados intereses: de la industria tequilera transnacional, los gobiernos? ¿No el mezcal artesanal se está enfrentado a poderes muy fuertes?

−La del tequila es una industria monstruosa con mucho poder económico y político. Por ejemplo: si nosotros producimos dos millones de litros anuales de mezcal certificado, aquélla llega a más de 200 millones. Hay una distancia enorme.

“Lo que a ellos les afecta no es tanto la cantidad de producción sino la proyección del mezcal, que está resonando mucho a nivel internacional como una bebida de altísima calidad, como una bebida orgánica, como una bebida de autor”.

Eso está afectando la imagen del tequila y de ahí que, antes de que el mezcal se consolide más, los industriales de aquél estén viniendo a darle corte a nuestro maguey con el fin de frenar el avance del mezcal.

El saqueo está afectando, añade, incluso a los grandes productores de mezcal: “a todos. Aquí ya no es sólo si soy pequeño o gran productor o de Miahuatlán o de Ejutla”, pues los tequileros “han ido a las regiones más recónditas de los valles centrales, la Mixteca, Sierra Sur”. Y hay consecuencias concretas. Han afectado, incluso, a las marcas comerciales.

−Has dicho que todos sabemos quiénes han sido los que corrompieron al mezcal, ¿puedes decir nombres?

−Pues sí sabemos, pero ahorita no es momento para dividirnos. De hecho, al encuentro “Sin Maguey no hay Mezcal” invitamos a marcas comerciales; que no hayan venido es otra cuestión, no sé cómo estén o vayan a sortear la problemática.

“Otra de las acciones que proyectamos es realizar un coloquio anual de maestros productores, no una feria de marcas, sino lo que somos: pequeños productores que vivimos en las diferentes regiones, en distintos pueblos indígenas, y contamos con diversidad botánica y elaboramos un mezcal de mucha calidad.

“El propósito es que este tipo de encuentros tengan continuidad y sean a nivel nacional, pues igual aquí que en Durango, Sinaloa o San Luis Potosí, los tequileros se están llevando el maguey”.

−¿Para qué fecha está pensando el coloquio?

−Estamos viendo, quizá para Semana Santa. Es cuestión de hablar con el municipio… porque, por ejemplo, ahorita ya un inspector me estaba preguntando si tenía permiso… mientras las transnacionales se están llevando nuestro maguey, los inspectores, los regidores, están cuestionando sobre el espacio que utilizamos para nuestros actos.

−¿Cuáles son estas transnacionales: Cuervo, Sauza?

−Hay ya muchas empresas que tienen infinidad de marcas. Ya no sólo son dueñas de diferentes tequilas, sino de vodkas, brandys, vinos. El problema no es con los pequeños productores de tequila, que también los hay, sino con las grandes transnacionales voraces.