Horacio Sosa Villavicencio, hermano de Flavio, ambos presos políticos por participar en la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) en 2006 y 2007, resultó electo, la noche de este domingo, presidente municipal de San Bartolo Coyotepec.
En una elección pacífica de Usos y Costumbres, el ex prisionero en el penal de máxima seguridad de El Altiplano, en el Estado de México, obtuvo cerca de 400 votos para ser ungido como nuevo Edil de ese municipio del Valle Central oaxaqueño.
Su más cercano competidor, René Mateos López, obtuvo más 300 votos, por lo que fue elegido por la población como síndico municipal.
En tanto, la señora Crecencia Salas fue nombrada regidora de Hacienda, y Marcelino Andrés, cuarto concejal.
En esta elección participaron más de 800 habitantes de San Bartolo Coyotepec y la jornada transcurrió con toda normalidad, sin incidentes. Las autoridades electas tomarán posesión de sus cargos el 1 de enero de 2011.
Horacio Sosa Villavicencio fue detenido junto con su hermano Flavio el 4 de diciembre de 2006 por elementos de la entonces Policía Federal Preventiva (PFP) en la Ciudad de México, tras ofrecer una conferencia de prensa sobre el conflicto sociopolítico que vivía Oaxaca.
Cual delincuentes peligrosos, acusados de sedición y sabotaje en contra del gobierno de Ulises Ruiz Ortiz, ambos fueron trasladados al penal de máxima seguridad de El Altiplano, donde permaneció varios meses.
Ante el desvanecimiento de pruebas –porque al igual que a su hermano Flavio y a todos los ex presos políticos de la APPO nunca les comprobaron los delitos por los cuales los aprehendieron, torturaron y encarcelaron–, Horacio Sosa fue cambiado al reclusorio regional de San Juan Bautista Cuicatlán, en la región de la Cañada oaxaqueña.
Los hermanos Sosa Villavicencio, así como César David Mateos Benítez, uno de los voceros de la APPO, fueron acusados de los delitos de privación ilegal de la libertad, lesiones calificadas y robo con violencia en contra de los policías ministeriales Joaquín Jiménez Ogarrio y José Luis Díaz Cruz, aunque nunca les pudieron probar nada.
