OAXACA, OAX., septiembre 25.- Investido el sábado pasado como nuevo presidente del Comité Directivo Estatal del PRI (CDE-PRI), Javier Mendoza Aroche, anunció que “terminará con las viejas prácticas que provocaron la fractura del Partido Revolucionario Institucional (PRI)”.
Ante 195 delegados distritales, además de centenares de militantes y simpatizantes de su partido llegados de las ocho regiones del Estado, Mendoza Aroche reconoció que “el PRI en Oaxaca es un partido que está fracturado”.
Y frente al proceso electoral del año próximo, 2012, ofreció: “Nosotros le vamos a dar mucha movilidad al partido para que cuando salga el candidato a la Presidencia de la República pueda tener confianza en el PRI de Oaxaca, porque hoy no hay confianza”.
Lamentó la inasistencia de un representante del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) que preside Humberto Moreira Valdés, y se comprometió a terminar con las viejas prácticas del priismo, aunque no las citó.
Reveló haber sostenido con anterioridad una plática con la directiva nacional del tricolor, en la que Moreira Valdés se comprometió a dar una solución al caso Oaxaca en dos semanas, “pero han pasado casi dos meses y no hay respuesta”.
Luego de rendir protesta ante la asamblea de delegados, Mendoza Aroche informó que “a partir de ahora el partido se regirá bajo tres preceptos: oportunidad, responsabilidad y creencia social”.
Confió también en que con el cambio de dirigentes priistas pueda cambiarse a Oaxaca con el firme compromiso de desaparecer a los grupos políticos que sólo buscan el control del instituto político para fines personales.
“Este PRI es organizado, tiene programa, preceptos y no teme a la democracia porque Oaxaca cambió y, por tanto, el PRI también debe cambiar”, dijo.
A la directiva de su partido que encabeza Eviel Pérez Magaña le demandó “reconocer que aquí hubo una gran representación estatal, que nosotros somos priistas de toda la vida, no improvisados y hoy somos el Comité Directivo Estatal”.
Por su parte, el ex diputado estatal, Raúl Corzo Llaguno, señaló que el pequeño grupo de priistas que dirige Pérez Magaña “cree que tiene al partido en sus manos y por eso se generó este gran movimiento reivindicatorio que surgió de la militancia y abarca a todo el estado”.
Luego sentenció victorioso: “Se terminaron los tiempos de unos cuantos; ahora seremos los priistas los que vamos a dirigir el destino de nuestro partido”.
Otros asambleístas manifestaron que a partir de ahora “las decisiones en el PRI no serán determinadas por unos pocos, sino realizadas por la mayoría”.
“Vamos a cambiar la forma de hacer política”, dijeron y advirtieron que quienes pretendan ser candidatos a puestos de elección popular “deberán demostrar honestidad, trabajo político, representatividad, compromiso con los priistas y respeto a los ordenamientos partidistas, porque ya se terminaron los privilegios, falsedades y componendas que han dañado al instituto político”.
Antes, el presidente de la mesa de debates, Armando Fuentes Villa, y la secretaria, Silvia Zárate González, avalaron la votación unánime en favor de los dos únicos candidatos, de consenso, a presidente y secretaria general del CDE del PRI: Javier Mendoza Aroche y Virginia Hernández Hernández, respectivamente.
Sin embargo, para el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI esta asamblea estatal de delegados “es ilegal porque sólo el CEN o el Consejo Estatal pueden convocar a elección de nuevos dirigentes y este no fue el caso”.
Y para la directiva nacional del tricolor, el único dirigente del PRI en Oaxaca es el diputado federal Eviel Pérez Magaña.
