OAXACA, OAX., enero 23.- La falta de actualización a la ley de pensiones para empleados del gobierno del estado, podría recaer en una inminente descapitalización del Fondo de Pensiones.
Los cambios políticos, sociales, demográficos y económicos que atraviesa la entidad, han vuelto obsoleta la legislación en esta materia.
Por este motivo, el gobierno del estado ha propuesto una iniciativa de reforma a esta ley, pues advierte una descapitalización al fondo, por el incremento en esperanza de vida, la insuficiencia de aportaciones, y el reconocimiento de la antigüedad desde su creación.
A esto se suma la incorporación de prestaciones no contempladas desde su origen, derivadas de convenios, el decremento de la tasa de crecimiento de nuevos aportantes.
En la exposición de motivos, el mandatario estatal, señala que el último actuarial practicado al fondo de pensiones, el pasado 31 de diciembre del 2009, refleja que el monto de los egresos por concepto de pensiones crecerá de manera significativa en los próximos años hasta alcanzar niveles económicamente fuera del alcance de la economía del estado, poniendo el peligro la seguridad social de los actuales y futuros jubilados, pensionados y pensionistas.
Con ello, se prevé que se genere un desequilibrio de las finanzas públicas del estado, además de que la reserva total del fondo de pensiones solo alcanzará hasta el año 2013.
Ante la inminente descapitalización, el gobierno y los trabajadores deben cubrir aportaciones y cuotas acordes a la realidad y para la pensión por jubilación se establecerá una edad mínima para obtenerla.
En su iniciativa de ley, Cué Monteagudo, establece que el Fondo de Pensiones, se constituirá con las aportaciones del gobierno del estado, equivalentes al 18 por ciento del sueldo de los trabajadores, y el 18 por ciento de las pensiones de los jubilados y pensionados.
Las cuotas de los trabajadores equivalen al 9 por ciento de su sueldo. Las cuotas de los jubilados equivalen al 9 por ciento de su pensión y las cuotas de los pensionados equivalentes el 9 por ciento de su pensión.
Entre los derechos que destacan para obtener la pensión, esta por jubilación: el trabajador que tenga 65 años cumplidos de edad y 33 años de servicios, y haya contribuido de forma normal al fondo de pensiones.
Por vejez: el trabajador el que tenga 65 años cumplidos de edad y cuando menos 15 años de servicios, y haya contribuido de forma normal al fondo de pensiones.
El monto de las pensiones por jubilación y por vejez se fijará, el 46 por ciento para 15 años de servicio; 48 para 16 años; 50 para 17; 52 para 18, 54 para 19; 56 para 20; 58 para21; 60 para 22; 62 para 23; 65 para 24; 67 por ciento para 25 años de servicio.
70 por ciento para 26 años de servicio; 73 para 27; 76 para 28; 80 para 29; 85 para 30; 90 para 31; 95 para 32 y el 100 por ciento del monto de la pensión para 33 años de servicio.
La reforma establece que los trabajadores que hubiesen ingresado antes de que la iniciativa de ley entre vigor, tendrán derecho a retirarse por vejez habiendo cumplido los 60 años de edad y 15 años de servicio y por jubilación al cumplir los 25 años de servicio para las mujeres y 29 para los hombres.
Los trabajadores que habiendo cumplido con 26 años de servicio en el caso de las mujeres y 30 para los hombres, que deseen permanecer como trabajadores activos, recibirán anualmente una cantidad que no se computara como sueldo base y desaparecerá al momento de jubilarse.
El monto ira del 10 por ciento hasta el 50 por ciento del sueldo base. Entre otros esos son los puntos notables de la iniciativa de reforma a la Ley de Pensiones para los empleados del Gobierno del Estado, que actualmente está en comisiones y que en breve será analizada, discutida y en su caso aprobada por el pleno.
Por lo pronto, un sector de la base trabajadora, ha salido a manifestar su rechazo a esta, por presuntamente violentar sus garantías laborales y los triunfos sindicales obtenidos.