OAXACA, OAX., agosto 12.- Familiares de detenidos de Santiago Amoltepec, denunciaron al reportero de Oaxaca en Pie de Lucha, Jorge Luis Martínez quien en ningún momento cuando arribó en un helicóptero de la Secretaría de Seguridad Pública a esa población, no se presentó como periodista sino como enviado de la Secretaría General de Gobierno, mintiendo y haciendo un trabajo de espionaje.
“No llegó como periodista ya que de otra forma lo hubiéramos respetado como lo hemos hecho con otros periodistas que han venido a conocer la problemática de nuestros conflictos agrarios en otros tiempos”, dijeron los familiares, quienes están desesperados porque ahora a sus detenidos no sólo los responsabilizarán de hechos que no cometieron, sino que podrían aumentarles el delito de secuestro a un periodista lo que se convierte en un delito federal.
Por eso, en entrevista, los familiares piden al periodista una explicación, cuál fue su actuación en Santiago Amoltepec así como del otro fotógrafo quien ahora se le conoce que trabaja en la Secretaría de Seguridad Pública, Fernando Rivadeneyra quien funge como subdirector de Investigación Policial, porque los dos cuando llegaron iban con la misión de filmar y fotografiar los rostros de quienes nos estábamos manifestando en contra del presidente municipal.
En entrevista, los familiares comentaron que los policías incluso, mintieron diciendo que iban a nombre de la comisionada de derechos humanos del Ejecutivo, Eréndira Cruzvillegas, por lo que ahora se exige que estos hechos se esclarezcan porque mintieron para llegar a la población, “por qué Eréndira no sale de sus oficinas para trasladarse a Amoltepec y dar la cara, no que envía a otros para darles una supuesta solución al conflicto que vive desde hace varios meses nuestro pueblo”.
Los familiares quienes desde la detención de sus familiares casi viven en esta capital, buscando cobijo con algunas amistades, claman justicia, sus lágrimas no paran, piden al gobierno del Estado realice una investigación exhaustiva sobre el origen del problema, pues la policía los detuvo porque estaban cerca de la cabecera municipal.
“Son chivos expiatorios” y nosotros ni culpa tenemos, nuestra vida ha cambiado, pero lo grave es el sesgo policial y judicial que puede tener, no queremos que los acusen de secuestro mucho menos a periodistas porque eso sí, queremos que quien se dice periodista no actúe de manera parcial, como lo hizo desde que llegó”.
Dijeron que cuando ya se encontraba retenido, Jorge Luis Martínez dijo ser periodista, al igual que el fotógrafo de Seguridad Pública, “mintieron, le mintieron al pueblo de Amoltepec y queremos saber hasta dónde el gobierno del Estado los está utilizando”, dijeron los familiares entrevistados en los juzgados penales.