OAXACA, OAX., octubre 15. — ¿Hay una nueva etapa de exhibición de cine documental en Oaxaca? Luna Maran e Isabel Rojas, responsables de Aquí Cine y Oaxaca Cine Alcalá, de forma respectiva, coinciden en que quizá sí.
La coordinadora de la red Aquí Cine, un tejido que se extendió a diversas ciudades, regiones y comunidades del Estado, enumera elementos que respaldarían tal posición:
La lección que nos ha dejado Aquí Cine es que “hay una necesidad, un gusto real por ver documentales y que es un mito eso que la gente no quiera ver cintas diferentes que tengan que ver con sus vidas y reflejen a sus comunidades”.
De forma general, Maran expone el contexto respectivo. Hace 20 años había en Oaxaca familias que exhibían cine y existían en la capital cinco o seis salas. Por la bancarrota, una década atrás los monopolios de exhibición se apoderaron del mercado. Pero hoy la situación cambió, pues surgieron espacios y cinéfilos que quieren ver un tipo de películas que no aparecen en los circuitos comerciales.
Isabel Rojas, directora de Oaxaca Cine, amplía el panorama a nivel nacional. Los canales de Aquí Cine, Oaxaca Cine y la Red de Exhibición Documental Doctubre del Festival Internacional de Cine Documental de la Ciudad de México DocsDF “van replicándose y creando un eco muy interesante” que ha provocado que “se atraiga a cierto público y una comunidad se reúna”.
A su vez, Fidel Enríquez, representante de Doctubre, ofrece un diagnóstico de la situación del documental a partir del impacto del proyecto:
A nivel de números, “el año pasado Doctubre sumó 25 mil asistentes en los foros externos al festival DocsDF y este mes se espera superar la cifra. Se cuenta con 180 sedes a nivel nacional y 15 iberoamericanas que descargan sus materiales a través de la plataforma web filmdu.tv que no sólo les da acceso a las cintas sino también a las nuevas tecnologías, lo cual implica una retroalimentación muy grande”.
Desde la perspectiva del “cine debate despierta la conciencia y la sensibilidad de los espectadores. Habrá algunos que comprendan y otros que no, pero el simple hecho de ver películas diferentes a las que están acostumbrados en los circuitos comerciales, es un gran aliciente para incentivar este tipo de exhibición en redes, cine clubes y foros diversos”.
En Oaxaca, Doctubre se ha extendido principalmente a través de las redes Aquí Cine, Gestores Culturales de Oaxaca y, ahora, Librespacio La Jícara: “la idea ha ido creciendo, al igual que la autogestión de los propios espacios”, dice Fidel Enríquez.
PUENTE ENTRE HUMANOS
La Red de Exhibición Documental Doctubre inició formalmente en esta capital el cuatro de octubre en Oaxaca Cine Alcalá con la cinta “Miradas múltiples/ La máquina loca”, de Emilio Maillé (México-Francia, 2012), del 14 al 16 continúa con la Primera Muestra de Cine Documental en San Martín Tilcajete y finalizará el jueves 31.
Doctubre es prácticamente un programa previo a la octava edición del festival DocsDF que se efectuará del 26 de octubre al 3 de noviembre en la capital del país.
Cuenta con 180 sedes en los 31 estados del país y el DF: 81cine clubes, 54 foros culturales, 27 espacios universitarios, 13 escuelas, cuatro reclusorios y penitenciarías de la ciudad de México y la Cineteca Zacatecas.
Además se ha ampliado a países iberoamericanos como Argentina, Colombia, Cuba, Ecuador, España, Guatemala, Panamá, República Dominicana, El Salvador y Puerto Rico.
“Lo más satisfactorio —expone Fidel Enríquez— es que los documentales se están acercando a pequeñas comunidades y a sitios en conflicto, como la sierra de Oaxaca o los reclusorios o Ciudad Juárez, pues es como si se abrieran ahí ventanas al mundo a través de diferentes narrativas que al final no tienen otra intención que tender un puente entre seres humanos”.
La realización de Doctubre en el Estado, señala Luna Maran, es un “trabajo de colaboración entre Oaxaca Cine, el festival DocsDF y Aquí Cine”.
En esta ocasión se exhiben 75 funciones en 20 comunidades de Valles Centrales, Istmo, Sierra Mazateca, Sierra Norte, Costa y Mixteca —más un espacio comunitario de inmigrantes oaxaqueños en el Estado de México— a través de 16 proyectos de exhibición (informes: www.aquicine.com/www.docsdf.org).
Los 16 proyectos de exhibición son: Tlacochahuaya;Yela Too, Guelatao de Juárez; Casa, Ciudad Ixtepec; Xaamkëjxp, Santa María Tlahuitoltepec; Coso, Cedart “Miguel Cabrera”; Tezoatlán de Segura y Villa; San Pablo y San Pedro Ayutla; San Juan Guelavía; Enamorartecinema, Tehuantepec; Cine Tepache, Chalco, Estado de México; Cinema Sueños Volando, Santa María Huatulco, San Bartolo Coyotepec, Santa María Atzompa, Santiago Astata y San Juan Chapultepec; Cinebrije, San Martín Tilcajete; Juchitán; Chutsijién ya’ña ibi, Mazatlán Villa de Flores; Teotitlán del Valle; Abasto Cinema, Central de Abasto.
DOCUMENTAL DEL VALLE
Además que convoca y es apto para toda la familia, explica Alberto Ruiz, coordinador del cine club de Teotitlán del Valle, al documental la gente puede digerirlo sin tener mayores estudios, amén de reflejarse en él.
El comentario de Alberto Ruiz surge cuando comentamos que en algún pueblo de Cuba donde la gente era analfabeta, no obstante, escuchaba y sabía todo de Bach o Mozart porque en esa comunidad nada más se oía una sola estación de radio y era de música clásica, y que la población de Tlahuitoltepec Mixe ha de estar bendecida por los dioses porque, cuentan, ahí no llega la señal de Televisa y TV Azteca.
Teotitlán del Valle es una comunidad que cuenta con entre cinco mil 500 y seis mil habitantes. Su realidad no es como su imagen turística. De acuerdo con el libro “Artesanas y artesanos: creación, innovación y tradición en la producción de artesanías”, de Jorge Hernández-Díaz y Gloria Zafra, la migración y el encarecimiento de sus famosos textiles impactaron de forma negativa a la comunidad.
“La población depende mucho del turismo, pero ahorita está un poco bajo —platica Alberto Ruiz—. No hay tanta demanda de sus textiles por la situación económica del país. Y cuando se habla de gastronomía tampoco es como luego dicen: tiene tres restaurantes pequeños”.
Alberto Ruiz (Teotitlán del Valle, 1979) es artista visual. Estuvo una década en Tijuana, Baja California, donde vivió y estudió. En 2008 regresó a Oaxaca y hace dos años reinició el cine club que 14 antes había creado Luis Ruiz.
La exhibición de documentales, comenta, la realizamos a través de las cintas que proporcionan Aquí Cine, Oaxaca Cine y Ambulante. Ahora también ya se cuenta con radio comunitaria y eso permite transmitir un programa previo para explicar de qué tratará la película en turno.
“Los jóvenes no tienen nada que hacer en la tarde, sólo estar en la calle. Caen en el alcoholismo. En general, las autoridades los limitan mucho, les cierran las tiendas, pero no les ofrecen nada a cambio. El cine club se convierte en una opción los sábados en la tarde. Las familias enteras acuden a ver documentales al aire libre”.
El cine club y la radio comunitaria están impactando a Teotitlán del Valle, sostiene Alberto Ruiz, generando como “esta unión otra vez, además de que a través de Internet y la transmisión de las proyecciones por ‘streaming’ se realiza una interconexión con la comunidad migrante que está en San Francisco, Chicago, Los Ángeles”.