EXPRESIONES.- La política no cambia y los políticos menos. Todos los días nos amanecemos con declaraciones, comunicados y opiniones tendientes a refutar lo irrefutable, como si todavía las autoridades estatales, federales y municipales tuvieran la credibilidad suficiente que sustente sus acciones.
Quizá por ello en el estado de Sonora, al intentar darle mantenimiento a una estatua del Benemérito Don Benito Juárez, ésta se puso verde del coraje ante lo incongruente que se sigue manifestando la política y los políticos en el país.
Para no ir muy lejos, la semana pasada en una reunión de gabinete el Gobernador Gabino Cué y sus más cercanos colaboradores detectaron “imprecisiones” en el reporte que el Consejo Ciudadano realizó sobre la seguridad en Oaxaca, considerando a la capital del estado como el municipio más violento del país, pues bien, ya encontraron un pretexto para minimizar ineficiencias.
Pero ya hubo un asalto a una Notaría en pleno centro histórico, con balacera al canto, siguen los asaltos a templos católicos y continúan las violaciones y asesinatos de jovencitas, ¿eso es seguridad?, ¿eso no es violencia? Son hechos que antes no se veían en Oaxaca.
Del mismo modo el rector de la UABJO, Eduardo Martínez Helmes, ante el surgimiento de una especie de “autodefensas” en el seno universitario para combatir la inseguridad, declara que en la UABJO el estado de derecho está vigente y guarda un silencio cómplice que lo evidencia.
Ahora nos salen con que Oaxaca ejerce su presupuesto con rostro social, cuando funcionarios de primer nivel como Germán Tenorio, secretario de Salud; José Zorrilla, secretario de Economía y Turismo y Netzahualcóyotl Salvatierra, secretario de las Infraestructuras, han sido señalados como corruptos e ineptos en sus cargos.
¿De qué se trata entonces?
Querer jugar con la inteligencia de los oaxaqueños pone cada día más a este gobierno en la ruta del descrédito y de la desconfianza.
Querer tapar el sol con un dedo, sólo nos llevará a más ingobernabilidad y violencia.
A los problemas hay que verlos de frente y aceptar la responsabilidad de ellos, no eludirlos o maquillarlos, pero sobre todo actuar, hacer ese trabajo que no se hace.
Ya estamos hartos de tanto protagonismo y simulación de eficiencia……
Oaxaca de Juárez, Oaxaca; domingo 16 de febrero/2014.
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