MÉXICO, D.F., julio 11.- La aprobación esta madrugada de las leyes secundarias en materia de telecomunicaciones, representa una acción política regresiva donde quien pierde es el Estado mexicano porque abandona la paternidad del control del espacio radioeléctrico y, las telecomunicaciones dejan de ser un servicio público de interés general, afirmó el diputado Hugo Jarquín.

Lamentó que con la aprobación de las leyes, ahora por parte de la Cámara de Diputados, continuarán las prácticas anti competitivas y los monopolios, pues no se contribuye a fortalecer el ejercicio democrático del Estado como tampoco se fortalece su capacidad.

Jarquín hizo un reconocimiento a sus compañeros de la fracción parlamentaria por no haber accedido a las “tentaciones”, y hayan rechazado la minuta como fue aprobada en el Senado que si bien, dijo, “tiene aspectos positivos como aquellos que tienen que ver con la telefonía celular y el costo de llamadas de larga distancia, hay otros aspectos que son contrarios a la letra de la Constitución”.

El legislador oaxaqueño dijo que indudablemente las reformas plantean cambios interesantes como el fortalecimiento del Instituto Federal de Telecomunicaciones como un órgano regulador autónomo o lo que tiene que ver con los derechos de las audiencias, cuyo Instituto deberá dictar los contenidos básicos de los códigos de ética de las empresas de televisión y radio y que la violación a los mismos estará sancionada.

Entrevistado al final de la sesión, Jarquín afirmó que lo ocurrido en la última semana en el Congreso ha significado la desnaturalización jurídica y política de la Reforma en telecomunicaciones que, recordó, el Grupo Parlamentario del PRD votó a favor, pero que lamentablemente, al final los intereses de las televisoras del país se impusieron.

En materia de concesiones de uso social e indígena de la radio comunitaria, el perredista dijo que si bien representa un pequeño resquicio en favor de organizaciones sociales e indígenas, contrariamente se les impide introducir un régimen simplificado para obtener sus concesiones y les prohíbe tener patrocinios o ingresos por publicidad.

Aseguró que con la aprobación de la Ley de Radiotelecomunicaciones y Televisión, representa sólo migajas que son, las que en los últimos días han cacareado las televisoras pero que un hecho el que no se regule a los monopolios y no se fortalece lo público y lo social.

Finalmente aseguró que con estas leyes, Estado de derecho no prevalece y las libertades y garantías de los ciudadanos están en peligro, lo que significará remar a contra corriente para que en un corto plazo revertir estas reformas que si bien tienen aspectos plausibles, tiene otros que las televisoras callan y son contrarias a la vida democrática de un país que como México, su gobierno se jacta de serlo.