OAXACA, OAX., febrero 10.- Las largas distancia que recorremos a diario, el calor, el tráfico, las largas filas en el banco, la presión, son alguno de los factores ambientales que influyen en nuestro estado de ánimo y pueden desencadenar emociones de impaciencia, enojo, ira, angustia o desesperación lo cual pueden dañar nuestro cerebro y corazón.
El doctor Jaime Ernesto Vargas Mendoza Psicólogo del Hospital General de Zona No.1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), detalla que cuando no Se tiene autocontrol, se elevan el riesgo de que desarrolles enfermedades cardiovasculares y neurológicas a causa del estrés, ya que cuando una persona rebasa los límites de su paciencia, deja de funcionar la corteza dorso lateral pre frontal (DLPFC).
Esta zona cerebral es la encargada de elegir las decisiones que se generan y la responsable de mantener el control en una situación crítica. Al perder la paciencia surgen las emociones de ira y hostilidad, que son factores de riesgo para desarrollar enfermedades cardiacas.
El corazón bombea sangre de forma más rápida, para que tus músculos estén preparados ante cualquier eventualidad, por lo que la pérdida de control aumenta la producción de catecolamina una sustancia que se encuentra en la sangre.
La catecolamina se adhiere a las arterias y obstruye el paso de sangre, por lo que corres más riesgos de padecer un infarto. El Psicólogo del IMSS, explica que la pérdida de paciencia genera estrés, así como la liberación de adrenalina y cortisol, hormonas que favorecen el sobrepeso.
Los altos niveles de estas hormonas elevan el azúcar y la grasa en la sangre, al respecto Vargas Mendoza refiere que las enfermedades cardiacas son la primera causa de muerte a nivel mundial. Una forma de prevenirlas es controlar y expresar las emociones como la ira, el enojo, el estrés y la impaciencia.
Hasta el momento no existe cura, sin embargo los tratamientos se centran principalmente en tratar de evitar los factores que disparan los síntomas, como son reducir el estrés y mantener una dieta saludable en la que se evite excesos de carnes rojas, embutidos, lácteos, condimentos artificiales, el cigarro y el licor, y agregar bastante líquido, además de incluir fibras a su dieta diaria.
Otras actividades como la Yoga y la Meditación también pueden ser de mucha ayuda para aliviar el estrés y realizar por lo menos tres veces a la semana por un lapso de 30 minutos; o algún tipo de actividad física, así como tratar de dormir lo suficiente, dijo el psicólogo del IMSS en Oaxaca.