EXPRESIONES
Todo parece indicar que ahora sí la SEP le ha puesto el cascabel al gato, orillando poco a poco a la Sección 22 de la CNTE a perder la fuerza que les había caracterizado para chantajear y presionar al gobierno federal y estatal, y aunque los maestros disidentes siguen retando al IEEPO y a la SEP en Oaxaca, estos ciertamente han perdido fuerza de movilización.
Sólo el 35 por ciento de las escuelas abrieron el pasado lunes ante el llamado de la Sección 22 a un paro nacional, fue el informe que dio Moisés Robles Cruz, titular del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO).
El funcionario considera que poco a poco está permeando la idea de que lo mejor es tener clases, y que la tendencia es ligeramente superior a la del pasado 2 de octubre (30 por ciento).
¿El dato es como para creer que vamos por buen camino?
Al parecer todavía no, ya que la actitud de la disidencia magisterial sigue igual porque hasta la fecha las autoridades sólo han proferido amenazas, pero ninguna se ha cumplido.
Los descuentos, dicen, se harán hasta fin de mes y las fuerzas del estado siguen haciendo acto de presencia pero sin intervenir en las acciones de chantaje y presión política que ha implementado la Sección 22.
El secretario de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño, expresó tajantemente que la Sección 22 de la CNTE “ya no es la autoridad educativa en Oaxaca” por lo que se les descontarán dos días de pago a los maestros que faltaron a clases para marchar.
Dijo el titular de la SEP que aunque los maestros de Oaxaca le temen a la CNTE, cada vez son menos los que acuden a las marchas, muestra de ello es que en la movilización del pasado lunes se manifestaron cinco mil maestros, cuando antes lo hacían de 20 mil a 30 mil profesores.
“No es rollo ni cuento”, dijo coloquialmente Nuño, “se van a aplicar descuentos a los maestros faltistas ya que hoy sí tenemos los instrumentos para hacer efectivo ese descuento, y lo vamos a hacer, que no tengan duda”.
Palabras que los oaxaqueños aún escuchamos con incredulidad y que suenan huecas ante los hechos que seguimos padeciendo ciudadanos y estudiantes, ambos víctimas de la impunidad y la simulación a la que nos tienen acostumbrados las autoridades.
Por eso mejor, como dijo Santo Tomás, “hasta no ver no creer”.
Oaxaca de Juárez, Oaxaca, miércoles 14 de octubre de 2015
