CIUDAD DE MÉXICO, marzo 9.- El coordinador de los diputados federales del PRD, Francisco Martínez Neri, acusó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) ha optado por reducir la evaluación docente a un simple esquema de premios y castigos, “lo que resulta insostenible desde cualquier enfoque pedagógico”.
Demandó que la SEP debe comprometerse a la mejora del proceso de enseñanza y aprendizaje y aseguró que “la evaluación no debe ser sólo del docente, sino del sistema educativo en su conjunto”.
Igualmente, señaló la necesidad de que el Estado brinde lo necesario para que el personal docente y el que tiene funciones de dirección y supervisión en servicio tengan opciones de formación continua, actualización, desarrollo profesional y avance cultural.
Martínez Neri, también integrante de la Comisión de Educación del Congreso federal, comentó que se reunirán en la Cámara de Diputados con titular de la SEP, Aurelio Nuño Mayer, quien presentará los resultados de la evaluación del desempeño y programa de formación continua para los docentes, mediante una reunión informativa.
Subrayó que el Estado mexicano no ha cumplido con sus compromisos para garantizar mejores condiciones de otorgamiento de los servicios educativos y no ha frenado el deterioro del sistema educativo nacional.
El diputado federal perredista apuntó que el problema generado por el cese masivo de los maestros conculca derechos humanos laborales. “La evaluación educativa que estableció el despido es un precedente excesivo en la historia de la educación en México”, agregó.
Recordó que otros trabajadores al servicio del Estado no son sujetos a un sistema de evaluación que tenga como consecuencia el cese de labores sin responsabilidad para la entidad o dependencia a la cual sirven.
Por ejemplo –mencionó–, un médico, una enfermera, un trabajador ambiental, un agrónomo, un perito, no están sujetos a las mismas presiones a las que se ha puesto a los trabajadores de la educación, ni como consecuencia de no ser “idóneo” para el puesto de trabajo se le cesa sin más.
“Es indebido que las autoridades educativas, además de la amenaza del despido a los maestros todavía se den el lujo de anunciar que no habrá liquidación para los mentores”, externó.
Sostuvo que el “premio” y el “castigo”, “la zanahoria y el garrote, serán recordados como instrumentos conductistas de un gobierno que no supo convencer de las bondades de la evaluación integral”.
Comentó que este tipo de disposiciones deben revisarse para cumplir con los objetivos de una reforma que busca alcanzar una educación de calidad con equidad.