LIBROS DE AYER Y HOY
Como que ese supuesto interés que están manifestando los perredistas en la Asamblea Legislativa por los peatones, no se expresa en las calles de la ciudad, ni ha llegado a oídos de los de la Secretaría de Transporte y Vialidad( SETRAVI).
La ciudad está convertida en lo más absurdo y peligroso con esas jardineras de flores amarillas -búcaros para las próximas lluvias-, que el usuario de camiones tiene que brincar para llegar a la acera, con el peligro de que una bicicleta o un carrito de esos de comida o mercancía que transitan sin orden y sin tomar en cuenta el sentido de la calle, lo atropellen.
Esos legisladores, como suele suceder, siempre llegan tarde. Ahora dos de ellos Víctor Hugo Romo y Leonel Luna, acaban de presentar una iniciativa, Carta para la Protección de los Derechos de los Peatones y el Espacio Público, que se inspira según dijeron en la ley de vialidad de 2014, que no sirvió de nada si vemos la cifra de peatones muertos en la gran ciudad solo en el 2015: mil 30, en setenta por ciento de accidentes ocurridos por falta de infraestructura.
¿A qué horas se aplicó la ley? Como siempre ocurre las leyes se hacen a modo – una para el día del niño, otra para el de la madre o para cualquier asunto que surja o se atraviese-, y ahora se pretende quedar bien con la Liga Peatonal, organizadora del Tercer Congreso Peatonal que en esta ocasión tendrá como sede la Merced en la Ciudad de México los días del 4 al 8 de mayo.
No es irónico que en una de las ciudades más grandes del mundo, de las más desorganizadas, en la que las motos se atraviesan a cada paso con semáforos parados o las bicicletas transitan en las banquetas y no digamos -¡oh terrible!- lo que hacen los carros, se realice un congreso de ese tipo.
El peatón aquí, siempre ha sido un personaje secundario. Los temas que abordará el mencionado congreso- talleres sobre el tema, rutas críticas, derechos de los niños a caminar, seguridad vial, uso de las calles y los espacios públicos, leyes relativas, activismo de caminar, usuarios vulnerables etcétera y la presentación del libro 30 días de peatón, de la editorial Caminante-, no son nada desdeñables y la intención es llamar la atención en torno a un personaje que puede ser el más agredido en el diario caminar y señalar las urgencias para poner fin a esa situación.
Notamos algo acéfala la convocatoria, quienes son los interesados, quienes están atrás, se conocen algunos personajes, legisladores del PRI y del PRD, -aparecen en escena dos ex delegados perredistas Romo y Luna, que no quedaron bien parados en sus gobiernos locales- y si pese a su importancia, hay una intención electoral en el asunto.
Pero la verdad es que la situación del peatón es desesperada. La muerte de peatones rebasa cualquier otro agravante, el alcohol, por ejemplo. Caminar por la ciudad de México para los incrédulos no hay asidero, para los creyentes, hay que ir siempre a la buena de dios.
A pie con Dios (Talleres de la Iglesia Adventista del Séptimo Día 2013), libro que mencionamos en otra ocasión, parece en este caso, un título adecuado para los capitalinos, habitantes en una selva de asfalto en lo que todo puede pasar. El título desde luego es metafórico y sus autores Fiñe Alberto Moncada y Carlos Raúl López lo utilizaron como un recurso para señalar pasos de humildad y sensatez.
Ellos van llevando al lector por caminos que ya transitaron o se remontan a viejos pueblos, algunos bíblicos, cuando la gente en realidad si andaba a pie, en burros o en camellos. Usan parábolas de la Biblia, para traer a cuento pasajes conocidos de ese libro, respecto a los cuales alertan al lector para recurrir directamente a la fuente.
Es un bonito libro, mágico, para todo tipo de lector, una obra que surgió de un portal, que a lo largo de los meses fue acomodando un gran público, que demandaba más y más historias. Páginas para caminar por esta caótica ciudad, A pie con Dios.
laislaquebrillaba@yahoo.com.mx
