Libros de ayer y hoy
Oaxaca reivindica al rábano en su tradicional Noche de rábanos el 23 de diciembre. El rábano ha sido una pieza hortelana sometida al escarnio popular, por su presunto poco valor y suele usarse para dar idea de lo mínimo que le importa a alguien una cosa.
Llevado el término a la política, el comportamiento de partidos y políticos ante los grandes intereses nacionales, debe ser sometido a esa valoración. Lo percibimos por las declaraciones del dirigente del PRI, Alejandro Moreno, Alito, que dice que el PRI no aprobará la reforma eléctrica, sin decir la causa, el por qué y la oscuridad de sus fines partidistas. La defensa de un sector fundamental, la reducen a la pequeñez de su actual estado.
La tradición popular oaxaqueña, que ha elevado a gran categoría al rábano en su fiesta anual Noche de rábanos, es en realidad, no solo la reivindicación de ese fruto (según la RAE), sino el trabajo de hortelanos y floricultores.
Oaxaca, un estado con buena potencia agrícola, convierte el tradicional oficio del cultivo de flores y siembra de verduras, en un aporte fundamental para el consumo del pueblo. El rábano pasa a ser entonces, el personaje herbario principal, arropado en el arte, la música, la poesía y toda la creatividad que se desprende de un pueblo como el de Oaxaca.
Y además, el alegre desfogue de la gente que en miles llega al zócalo citadino a rendir homenaje a esa también considerada verdura, que coincidentemente tiene el color del rosa mexicano. Es una fiesta que ya está inscrita en las muchas tradiciones y festividades de los pueblos de México, algunas vinculadas como ésta, a las fiestas decembrinas.
Esta fiesta se realiza cuando en otras regiones se ensalza a nuestra flor universal la Cuetlaxóchil, mientras la delicadeza de la dalia nuestra flor nacional, espera el momento para brillar con su olor y belleza propios.
Al rábano se suman en exposiciones, la flor inmortal y el totomoxtle
En fechas recientes se han agregado al rábano, dos personajes más, la flor Inmortal y el Totomoxtle ¿Qué es lo que son? La primera es una flor muy común en ese estado que suele secarse para realizar artesanías y el segundo no es sino la hoja del elote, que al secarse también sirve para diseñar multitud de artesanías.
La festividad no solo tiene la función de reconocer el trabajo de cultivadores del campo, sino dar lecciones artesanales de cosas sencillas que dejan maravillados a los visitantes cuando las contemplan el día del festejo.
Respecto al primero, hay que señalar que su consumo es típico en nuestro país en ciertos platillos como el pozole, durante las fiestas patrias, pero en otros países como China y Japón es altamente reconocido.
La postura de ciertos niveles sociales muy fifís, suele descalificar alimentos que son básicos para el pueblo y lo vemos en el nopal. Yo recuerdo que en una visita que hice al Acrópolis en Atenas, al asomarme a la ladera del gran cerro donde están los maravillosos aportes de la cultura helénica, lo primero que vi fue una profusión de plantas de nopal que coexistían quizá con las voces ahí eternizadas, de Platón, Sócrates y Aristóteles.
Desde 1897 se empezó a festejar al rábano en Oaxaca
La cultura del rábano se gestó como parte de una lucha de productores, escenificada a fines del siglo XIX en la Plaza de Armas de aquel entonces que ahora se llama Jardín Constitución. En el deambular metafórico que tiene la gente a este fruto cuyo nombre científico es Rafhanus Sativus L, le ocurrió lo que al asno que es un animal sometido a escarnio también y utilizado para los peores ejemplos de ignorancia, cuando es uno de los más nobles y útiles animales.
La culpa viene desde Esopo que, ante su temor como esclavo que era de los poderosos de la época, utilizó la metáfora en animales para ocultar su verdadero mensaje. En su libro Noche de rábanos, el profesor Alejandro Méndez Aquino ha desarrollado la historia ya simbólica del rábano, con datos e investigaciones que informan a los que se muestran extrañados por tan rara festividad.
El libro ha tenido mucho éxito y muchas ediciones, algunas del propio gobierno de Oaxaca desde sus organismos culturales, en 1990, 1997, entre otras, con la más reciente del pasado mes de abril de la Red de Información Cultural.
El rábano también entra en la canción popular. Aquí de Los Norteños de Ojinaga, Los rábanos, una canción cuyas estrofas se repiten muchas veces.
Cuando andábamos cortando rábanos,
unos comíamos y otros cortábamos.
Cuando andábamos cortando rábanos,
unos comíamos y otros cortábamos
Son unos rábanos y son para mí.
No sé qué hiciste con los que te di.
Corta los rábanos,
córtalos tu.
Teresa de Jesús Gil Gálvez
Nací en La Colorada, Sonora, estudié en la Universidad de Sonora que me dio mención honorífica por mi tesis La libertad de prensa en México. En la UNAM hice estudios de maestría en Ciencias penales. En medios sonorenses trabajé, desde la adolescencia, en los más importantes del estado y en julio de 1972 salí en un tren hacia la gran capital, donde he trabajado en medios importantes, diarios, semanarios y revistas, con breves retiros al mundo entre ellos una corresponsalía en España.
Colaboradora desde enero de 2017.