Libros de ayer y hoy
En realidad la ciudad es el verdadero personaje de Rodrigo Aridjis el pintor, en la obra que escogió para dar vida a lo que fluye en La ciudad y sus personajes. Y si en la ficción las cosas son personajes, el metro es uno de ellos. Y ahí es donde estará en ese Sistema de Transporte Colectivo hasta el 31 de diciembre, la exposición del pintor de Contepec, en dos estaciones, Pino Suárez y Candelaria.
Son casi 40 las obras exhibidas. Quien asista, verá de todo lo que vibra y transita y acoge la ciudad, y se verá a si mismo. En medio del colorido de las obras, hay que penetrar en la esencia de lo que quiere el expositor “la no discriminación de los seres que nos rodean” y “resaltar el papel que jugamos todos en la configuración de aquello que le da carácter y personalidad a las ciudades en que vivimos”, tal como él lo escribió.
Un pintor que se prepara con ahínco, a ser uno de los grandes
Desde el 2012 Aridjis empezó el tránsito por esta gran concentración y congregación que es la capital de la República y siendo su principal creación la mencionada, ha incursionado en otras modalidades para llegar en este momento a 500 obras. Algunas exhibidas en 25 exposiciones, en la Ciudad de México y otros estados. La exposición fue aprobada por el responsable de cultura del Metro, Jaime López Vela.
En la instalación de dicha exposición en la que fue curador el coordinador de Artes Visuales del Metro Héctor M. Zenteno Ochoa , estuvo presente en el apoyo el maestro pintor Tomás Parra. Intervino también el serigrafista Raúl Escobedo Rodríguez. El expositor se quedó sorprendido de como los grandes pintores, como es el caso de Parra, miembro destacado de la corriente de la Ruptura (aquella que se opuso al muralismo), delineó la exposición en forma matemática en el uso de los espacios, lo que significa que un pintor no solo debe saber pintar. Leonardo lo demostró. Parra fue uno de los pintores que estuvo presente con su obra y su presencia en la reciente exposición de Vlady organizada por la UACM. Es de los pocos que sobreviven de esa corriente.
Importante función cultural realiza el metro de la CDMX
Son muchos los pintores que han usado los espacios y tribunas del Metro y en algunas estaciones como la Zapata, las paredes tienen en parte cubierto el espacio con retratos y caricaturas. Ahí desfila en muchas poses y delineaciones Emiliano Zapata. Desde mi punto de vista esas exposiciones deberían de ser transitorias como las exposiciones pictóricas, porque se acaparan por años espacios que pueden extenderse a otros personajes y próceres del país.
Hubiera sido muy interesante por ejemplo que Francisco Villa a quien se dedica este año, hubiera sido signado con su gran personalidad en una estación. Después de todo él es el gran revolucionario frente a don Emiliano cuyas luchas en el campo de batalla no se conocen. Se sabe de su Plan de Ayala en el que insulta y cuestiona a Francisco I Madero, pero quizá algunos de los caricaturistas no han leído bien ese plan, que es el de la traición al impulsor de la Revolución Mexicana.
Los personajes de la ciudad son muchos y algunos están en el metro
Aridjis ha ido recopilando a lo largo de los años los rostros y figuras de esos seres vivientes que transitan por la ciudad, a veces en la búsqueda difícil para sobrevivir. Tiene globeros, payasos, malabaristas, vagabundos y todo lo que se agrega a la visión diaria del transeúnte. Este mismo es un personaje. Veamos en una parte, como delinee a una petición suya, a un vagabundo.
No quise ser vasallo ni quedarme prendido en la normalidad del día. Jugué, fui bebedor, amante tierno, volátil zancadilla. Perseguidor de nada un don nadie sin fe, un expulsado. El mundo me sacó y yo, en venganza, me apoderé del mundo. Todo el confín es mío noche y día, invierno y primavera. Vagamundo eso soy. Un vagabundo
Teresa de Jesús Gil Gálvez
Nací en La Colorada, Sonora, estudié en la Universidad de Sonora que me dio mención honorífica por mi tesis La libertad de prensa en México. En la UNAM hice estudios de maestría en Ciencias penales. En medios sonorenses trabajé, desde la adolescencia, en los más importantes del estado y en julio de 1972 salí en un tren hacia la gran capital, donde he trabajado en medios importantes, diarios, semanarios y revistas, con breves retiros al mundo entre ellos una corresponsalía en España.
Colaboradora desde enero de 2017.
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