EXPRESIONES.-Arropado por la Sección 22 de la CNTE, el candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, vino nuevamente a burlarse de los oaxaqueños.
También contó con la zalamería del candidato al Senado, Benjamín Robles Montoya, uno de los principales protegidos del gobernador Gabino Cué Monteagudo, quien se atrevió a llamarlo “Señor Presidente”, cuando ni ya se llevaron a efecto la elecciones y el propio AMLO, en estos momentos, ya reconoce la autoridad de Felipe Calderón al “andar buscando un dialogo” de acercamiento con el Presidente de la República.
Los reunidos en la Alameda de León este sábado pasado, parecían hienas burlonas de la debacle oaxaqueña, que no sólo nos tiene postrados educativamente hablando, sino que precisamente en ese día azotaba la fuerza del huracán Carlotta en la costa oaxaqueña.
Eso no pesó para que López Obrador lanzara de su ronco pecho que “surgirá en Oaxaca el modelo educativo nacional”, como si los maestros de la Sección 22 fueran el prototipo de lo que necesita el país para mejorar la calidad de la educación.
¿Se imaginan ustedes un modelo educativo Made in Santiago Chepi?
A Andrés Manuel López Obrador poco le importó la desgracia oaxaqueña en la costa y vino a hacer proselitismo político rodeado de la peor calaña magisterial de Oaxaca. Esa que poco le importa la educación y que lleva más de 30 años fregando el presente y el porvenir de más de un millón trescientos mil niños y jóvenes oaxaqueños.
Y esto no es criminalizar a los maestros, sino una realidad que fluye en el sentir de la sociedad oaxaqueña que ya está harta de tanta simulación y mesianismo político…..
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