OAXACA, OAX., diciembre 2.- La presencia del coordinador de la bancada del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la LXIII Legislartura del Estado, Irineo Molina Espinoza, en la toma de protesta del gobernador Alejandro Murat Hinojosa dejó al descubierto la fractura que se vive al interior de las tribus de este instituto político representadas en el Congreso del Estado.
Y es que siete de los ocho diputados y diputadas de Morena acordaron NO asistir a la ascensión del nuevo Gobernador de Oaxaca, entre ellos María de Jesús Melgar Vásquez, del distrito XII de Santa Lucía del Camino, e Hilda Graciela Pérez Luis, del Distrito XIII de Oaxaca de Juárez.
Igualmente, los legisladores de representación proporcional como Leonardo Lucas León, Candelaria Cauich Ku, Fernando Lorenzo Estrada, Neli Espinoza Santiago y Javier Velásquez Guzmán.
Pero al enterarse que finalmente su coordinador de bancada y también presidente de la Junta de Coordinación Política (JCP) de la LXIII Legislatura, Irineo Molina Espinoza, sucumbió al llamado priista y decidió acudir para convalidar el hecho, devino la crisis en el partido del por tercera vez aspirante a la Presidencia de la República: Andrés Manuel López Obrador.
El enojo y la indignación fueron evidentes en Pérez Luis, Espinoza Santiago y Lorenzo Estrada, quienes desde los primeros minutos del 1 de diciembre de 2016 iniciaron una revuelta con tintes de venganza política contra Molina Espinoza y hasta prometieron que “van por su cabeza”.
El sisma en la bancada de Morena fue evidente la mañana del jueves 1 de diciembre, cuando citaron a conferencia de prensa.
Molina Espinoza argumentó que desconocían lo del cambio de sede y hora para la toma de protesta del nuevo Gobernador, que no fueron notificados todos y a él le informaron del “madruguete” minutos antes, pero tuvo que asistir por ostentar el cargo de Presidente de la JCP. Ante los cuestionamientos, negó que asumiera esa posición por un pacto con el PRI.
Nervioso, respondió ante cámaras y micrófonos de los reporteros: “Un servidor es notificado minutos antes, un servidor en el cargo que ostenta como Presidente de la Junta de Coordinación Política, a decisión personal, decidí estar en el evento. Debo ser institucional con Oaxaca. Mis compañeros no fueron convocados. No hay evidencia” (sic), se justificó.
“Ostentamos la Junta de Coordinación porque somos la segunda fuerza política, así de simple”, completó.
Luego tomó la defensiva. Acusó que este acto demuestra omisión hacia los diputados de Morena por parte del actual Gobierno y del presidente de la Mesa Directiva, el priista Samuel Gurrión Matías.
“Yo estaba informado que la sesión sería a las 7:30 de la mañana; sin embargo, minutos antes me notifican y en mi carácter de Presidente de la Junta acepte asistir, pero no traicioné a mi instituto político”, atajó.
Dijo que ante esta acción, la fracción parlamentaria desconoce al gobierno que encabeza Alejandro Murat Hinojosa, iniciada con actos regresivos, y hasta adelantó que analizan las acciones que emprenderán “porque la confianza que depositó Morena en el PRI se minimizó” (sic).
Y frente a una inminente fractura en su bancada, concedió que su permanencia “es un tema que platicarían más adelante, dentro de la fracción y el comité”.
“Durante el corto tiempo que llevo al frente de la Presidencia de la Junta de Coordinación Política se han tomado las medidas de austeridad y transparencia para que a Oaxaca le vaya bien”, dijo al puro estilo de López Obrador.
Insistió en que “Morena ha conseguido espacios en el Congreso del Estado por su peso electoral, no por otra cosa”.
LAS TRIBUS DE MORENA
Irineo Molina Espinoza, del Distrito III de Loma Bonita, ha sido dos veces presidente municipal de Chilpetec, y supuestamente gozaba de buena relación con el resto de las tribus morenistas.
Sin embargo, mantiene una relación estrecha con el grupo de los hermanos Rosendo y Félix Serrano Toledo, los ex diputados locales y federales conocidos como “Los Chendos”, a quienes se les relaciona como incondicionales del ex gobernador José Murat Casab.
Por su parte, la diputada Neli Espinosa Santiago, fundadora de Morena, es identificada con el candidato perdedor de Morena a gobernador, Salomón Jara Cruz, acusado de corrupción millonaria cuando fue titular de la Sedapa.
En tanto, María de Jesús Melgar Vásquez, del Distrito XII de Santa Lucía del Camino, es relacionada con el secretario general de Morena, Sezul Bolaños, y el la Sección 22 del SNTE.
Hilda Graciela Pérez Luis, del Distrito XIII de Oaxaca de Juárez, pertenece al grupo del ex rector de la UABJO, Abraham Martínez Helmes.
Candelaria Cauich Ku, según los propios morenistas, está identificada con la corriente de la UTE de la Sección 22 del SNTE, que dirige Gerardo Garfias Ruiz, lo mismo que Fernando Lorenzo Estrada y Candelaria Cauich Ku, aun cuando ésta última ha sido acogida por el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT) que dirige el ex diputado local Rufino Merino Zaragoza.
Mientras tanto, aseguran que León Leonardo Lucas se sacó la lotería legislativa, o la “rifa del tigre”, porque no tiene grupo con el que se le identifique, al grado que podría ser cooptado por cualesquiera de las distintas fracciones que perviven en la naciente LXIII Legislatura del Estado.