Pongamos todo en perspectiva
Para muchas y muchos, como yo, el regreso de la banda mexicana de post-rock, Austin TV, es un abrazo para el alma luego de más de 9 años fuera de los escenarios y de la esfera pública como grupo. Quienes crecimos escuchando su música, crecimos en un ecosistema en donde el Myspace y el Metroflog, eran el símil de TikTok e Instagram en la actualidad.
Con su lema de mil batallas “Tú cara importa, importas tú”, revelaban que el proyecto iba a versar acerca de las sensaciones, la música y como los silencios y las melodías se podían bailar y no necesitar de una voz cantante, voz que ocasionalmente se convertía en gritos o fragmentos de películas, y que a su vez sólo servirán de acompañamiento mientras las hojas caen.
Como músico, que intentó pertenecer a la ola musical independiente, fueron un modelo a seguir; no tenían un sello discográfico grande detrás, el internet fue su mejor difusor y lograron llegar a sitios en donde jamás hubieras pensado ver a un proyecto independiente mexicano.
El misticismo que rodea(ba) a la banda siempre fue parte de su encanto, cada escenario que pisaban, lo convirtieron en suyo; algunas veces con máscaras de conejo, otras disfrazados de árboles, siempre respetando la regla principal: lo que importa eres tú.
Austin TV representa todo por lo que una generación luchó: ser uno mismo, trabajar en equipo, construir juntos, respeto, paz y armonía, lamentablemente, el tiempo no nos perdonó y como la gran mayoría, nos tocó crecer. Sin embargo, siempre había espacio para voltear atrás y recordar ese momento de libertad, muchos sentimos que olvidaron decirnos adiós.
Abrazados por rockeros y por emos, que en aquel momento era la principal lucha de castas, hoy en el país nos han dicho que tenemos que estar divididos entre chairos y fifís o whitexicans y morenos. Su regreso parece un respiro, no hace falta esperar a las flores sobre las piedras, hoy podemos reunirnos a su alrededor.
Siempre estuvieron ahí, creciendo con nosotros, pero siempre expectantes. Crípticos como usualmente, o al menos como yo recuerdo, un día aparecieron posters en la capital del país con su icónica frase. De repente, un correo electrónico llegó a quienes escanearon el código del cartel y descubrimos lo que estaba pasando ¡Austin TV regresaba con un nuevo sencillo! el cual no desentona con la estética que los ha caracterizado.
Un cambio de portadas e imágenes de perfil en sus redes sociales y se oficializó. Era un hecho, soñamos años por este momento, sin embargo no se sentía bien, se sentía como que nadie está aquí, no hay nadie aquí, nada hay aquí.
No todo fue celebración, y con esto espero no herir susceptibilidades. Primero, el regreso se da con “Wakks” manager de proyectos que arrastra un par de acusaciones que no se han desestimado y que son bastante graves. Lo segundo, Mario Sanchez, miembro pilar del proyecto no regresaría por continuar su labor como Managing Director en Downtown Music México. Tercero, de un día a otro avisaron de un evento en el mítico Multiforo Alicia, el cual evidentemente no daría espacio a los miles de fans que reunirían. Cuarto y más importante, perderían esa esencia críptica que siempre los caracterizó, esa fina medición de los detalles para hacer cada experiencia única.
En el momento en que termino de redactar estas líneas, el Foro Indie-rocks ve el regreso de una de las bandas más importantes de la historia del rock mexicano, mientras muchos disfrutamos en silencio en nuestras casa imaginando esa emoción, deseando que no sea la última noche del mundo que los vea juntos en un escenario.
Carlos Villalobos
Administrador Público de formación y opinólogo geromeño por convicción. Creo en la construcción social de una agenda mediática plural y en que todas y todos tengamos una voz. Coordinador de El Garage Istmeño y escritor semanal de “Pongamos todo en perspectiva”, un ejercicio de reflexión hecho columna de opinión. Usualmente hablo de temas que me apasionan.
*Colaborador desde el 10 de septiembre de 2022.
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